Este artículo se publicó hace 3 años.
El personal de enfermería se podría reducir al 50% a nivel mundial, según el Consejo Internacional de enfermeras
El cansancio y la decepción fruto de su trabajo y poco reconocimiento durante los meses de pandemia, sumados al agotamiento tanto físico como mental de los profesionales son sólo algunas de las razones.
El Consejo Internacional de Personal de Enfermería, representado por su director ejecutivo, Howard Catton, ha revelado este viernes que prevén una reducción del personal de enfermería del 50% a nivel mundial.
En cualquier caso, la situación ya es crítica. Pues, desde que empezó la pandemia ocasionada por la covid 19, ya se había producido un déficit de seis millones de profesionales y el virus se ha llevado, según datos oficiales, la vida de 115.000 profesionales. Además, de los 27 a 28 millones de enfermeros y enfermeras que se han registrado en el mundo, se prevé que siete millones se jubilen.
A todo ello se suma el agotamiento tanto físico como mental de los profesionales y lo que los expertos han denominado el "efecto covid". Es decir, el escaso reconocimiento hacia la profesión después de dos años de pandemia y el cansancio y decepción que ello supone.
En este sentido, las distintas asociaciones que integran el Consejo han realizado sondeos entre sus miembros. Estos apuntan que entre un 10% y un 15% –aunque en algunos países es mayor– de profesionales de la enfermería pretenden abandonar su empleo en un periodo de seis a 12 meses.
Diferencias entre continentes
Este problema no afecta igual a todos los países. En África, por ejemplo, sucede que en muchos estados únicamente una cuarta parte de los enfermeros han podido vacunarse.
Por otro lado, otros países con una economía más potente ya están tratando de solventar la escasez de profesionales de la enfermería. Para ello, han ideado programas de contratación internacional de enfermeras que llegan, principalmente, desde Filipinas e India.
Este hecho, que no ha pasado desapercibido en el continente africano, podría acarrear graves problemas en los sistemas sanitarios de estos países que están perdiendo profesionales.
Desde el Consejo, han instado a los ministerios de Sanidad no tanto a contratar más profesionales, sino a tomar conciencia de la importancia de que no abandonen su profesión reconociendo su labor y recompensándola atendiendo a sus demandas económicas y de seguridad.
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