Este artículo se publicó hace 13 años.
Las petroleras abandonan el país
El crudo se dispara un 5% en un día. Libia es clave en el suministro a España
La rebelión libia disparó ayer el precio del petróleo Brent (de referencia para Europa) hasta 108 dólares por barril, su máximo desde septiembre de 2008. Ante la oleada de violencia, varias petroleras internacionales empezaron a evacuar a su personal en el país; entre ellas, la alemana Wintershall, la angloholandesa Shell, la británica BP, la italiana ENI, la austriaca OMV y la española Repsol.
La compañía que preside Antoni Brufau, con 500 empleados en Libia, de los que unos 70 son extranjeros (la mayoría, argentinos), explota un yacimiento en una región aislada del país, a unos 600 kilómetros del núcleo urbano más próximo. De momento, el campo de Repsol en Libia (país que supone un 3,7% de la producción del grupo) está operativo, pero si la situación se agrava, se cerrará, al igual que los de otras compañías foráneas presentes en el país, cuyo papel es clave para el suministro al exterior (en el interior, el mercado está en manos estatales).
La mitad del petróleo que consumen Francia o Alemania es libio
El Brent se encareció ayer más de un 5%, la mayor subida intradía desde septiembre de 2009 y una muestra de que, para el bolsillo del consumidor occidental, los acontecimientos en Libia son un punto y aparte en la secuencia de acontecimientos que arrancó cuando, el pasado 17 de diciembre, la inmolación de un joven tunecino prendió la mecha de la revuelta norteafricana. En estos dos meses, el precio del Brent ha subido un 14%. Y todo indica que la escalada no va a quedarse ahí. La revolución egipcia fue un primer aviso, por la importancia estratégica del Canal de Suez para el transporte marítimo de crudo entre Oriente Medio y Occidente. Pero Libia es otra cosa: es el primer actor relevante del mapa energético mundial que sucumbe a la oleada de protestas.
Clave para EuropaEl país norteafricano, que produce un crudo de muy alta calidad (ideal para su conversión en gasolinas), es el trigésimo productor mundial de petróleo (2% del total) y es clave para el suministro a Europa. Sin llegar al nivel de dependencia de Alemania, Francia o Italia (que compran a Libia la mitad del crudo que consumen), el país norteafricano es muy relevante para España, sobre todo, en lo que respecta al petróleo: es el tercer proveedor, con el 12,7% del total. En gas, su aportación es de sólo el 1,7%. Muy poco, si se compara con la de Argelia, otra dictadura en la que también ha habido amago de revuelta y que aporta un tercio del gas que consume España.
Para España, el país norteafricano es el tercer proveedor de crudo
Como dice Mariano Marzo, catedrático de Recursos Energéticos de la Universidad de Barcelona y uno de los mayores expertos del sector en España, "cuidadito". "Más allá de la interrupción puntual del suministro por la situación en Libia, la cosa puede ir más allá", subraya Marzo, que alude a la posibilidad de que la inestabilidad se extienda a otros países y desincentive la inversión en yacimientos. "Este es un negocio en el que pasan diez años desde la primera inversión hasta que sale el primer barril del pozo", recuerda Marzo. En conjunto, los países afectados hasta ahora por las revueltas sólo suponen un 3,4% de la producción mundial de crudo. Por sí solos, Irán (5,3% de la producción mundial) y Arabia Saudí (12% del total) son palabras mayores.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.