'Shock' en Italia tras la puesta en libertad de un miembro de la 'manada de Palermo'

La indignación vuelve a apoderarse de Italia tras la puesta en libertad de uno de los siete jóvenes de entre 17 y 22 años detenidos por una violación grupal a una joven de 19 años en la ciudad siciliana de Palermo el pasado 7 de julio.

El juez encargado del caso tomó declaración el martes a varios de los miembros de la manada de Palermo después de que fueran trascendiendo en prensa imágenes grabadas por las cámaras de seguridad y algunos de los mensajes que los presuntos agresores se intercambiaron tras los hechos.

La agresión, denunciada por la propia víctima, se produjo de madrugada, después de que la chica pasara varias horas con el grupo en un club de la ciudad tras ser invitada a través de Instagram por uno de ellos, al que ya conocía previamente.

Violada por turnos y grabada

En el local, los jóvenes la emborracharon y, según la denunciante, añadieron sustancias en su bebida. Más tarde fue conducida a la fuerza por los siete jóvenes a un lugar aislado en el centro de Palermo, como muestran las imágenes de varias cámaras de seguridad, en las que puede verse incluso cómo es arrastrada.

Allí fue violada por turnos y grabada por sus agresores con un teléfono móvil. La grabación, en manos de la Policía, ha sido determinante para la investigación y da muestras de la brutalidad y la violencia que sufrió la víctima.

"Cien perros sobre una gata"

"Me dio un poco de asco, la verdad, porque éramos como cien perros sobre una gata; pero qué se le va a hacer, la carne es la carne", escribió a sus amigos uno de los presuntos agresores. "Te juro que después de que se encontrara mal, se echase al suelo, llamara a la ambulancia, la dejamos allí y nos fuimos. Ella quería hacérselo con todos, al final cumplimos el capricho", proseguía. 

"Le hice daño, ella no quería, decía: 'No, para'", recoge uno de los mensajes de los presuntos agresores

En otro de los mensajes intervenidos, uno de los presuntos violadores reconoce la violencia contra la víctima. "Le hice daño, ella no quería, decía 'no, para'. Los puñetazos que le dieron y también las bofetadas, no respiraban", decía.

Durante su declaración ante el juez, tres de los acusados han reconocido que estuvieron con la joven aquella noche, aunque negaron la violencia. Otros han insistido en que la joven consintió desde un principio mantener relaciones sexuales, una de las estrategias de defensa más utilizadas para este tipo de procesos judiciales, en los que a menudo se culpabiliza a la propia víctima de la agresión.

En libertad un agresor confeso

El juez ha confirmado la prisión para al menos tres de los presuntos violadores, aunque ha sorprendido, sin embargo, la puesta en libertad provisional del más joven de los detenidos que ordenó el martes el Tribunal de Menores.

El acusado, que cumplió los 18 años pocos días después de los hechos, había reconocido la agresión y era uno de los que aparecían en las grabaciones. Según la Fiscalía, que solicitará su vuelta a prisión, este joven fue uno de los más violentos y ha mantenido su actitud desafiante durante todo el proceso, asegurando que la víctima era plenamente consciente y que consintió mantener relaciones.

Tras su puesta en libertad, el presunto violador escribió en sus redes sociales el martes: "¿Hay alguna chica que quiera salir con nosotros esta noche?". También comentó en su redes que salía en libertad "más fuerte que antes".

"Castración química"

Consciente del impacto y la indignación que este caso está generando entre la opinión pública, el vicepresidente italiano, el ultraderechista Matteo Salvini, pidió el lunes "prisión y castración química" para "violadores y pederastas italianos o extranjeros".

Se trata de uno de los proyectos de ley que ha presentado su partido, la soberanista Liga, que gobierna junto a Fratelli d'Italia (Hermanos de Italia), la formación ultra de la primera ministra, Giorgia Meloni.

Tras hacerse eco en X –antiguo Twitter–, de los mensajes intercambiados por los miembros de la manada de Palermo, Salvini escribió: "Estos son solo algunos pasajes del terrorífico relato recogido por la prensa. Repugnante. Inhumano", y añadía que "ante estas bestialidades imperdonables, no basta con una pesada carga: no se debe permitir que quienes cometen semejante error vuelvan a repetirlo". En ese sentido, recordaba que su proyecto de ley que recoge la castración química "sigue adelante y sin demora".