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"Veo los cadáveres de este bombardeo sin sentido"

El cooperante palestino Moutazz AbuRamadan cuenta en 'Público' cómo vive la ofensiva militar israelí desde su casa junto al puerto de la ciudad de Gaza

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En cualquier otro sitio, hoy habrá sido un día precioso con el sol brillando en el cielo azul, pienso. Pero entonces me doy cuenta de que esto es la franja de Gaza. Y es aquí donde estamos sufriendo la guerra más brutal que hemos visto en mucho tiempo contra la maquinaria de guerra israelí. Un enemigo que en muchas ocasiones ha declarado abiertamente el escaso aprecio por la vida de los palestinos, en especial los de Gaza.

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Hoy no ha sido un día muy diferente a los 12 anteriores en Gaza. Hoy no me he levantado con el habitual canto de los pájaros. He sido despertado por unos cazas F-16 israelíes rompiendo la barrera del sonido con sus bombardeos. Durante varios meses, los habitantes de la franja de Gaza tienen, como yo, que acostumbrarse a lavarse sin agua caliente. A vivir en la oscuridad sin electricidad.

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Tenemos que abrir las ventanas si queremos que entre algo de luz y, con ella, también el frío. Mientras enciendo mi radio a pilas para escuchar los horrores de la noche anterior rezo porque ninguno de mis familiares o amigos esté entre los heridos. Desgraciadamente no es así. Escucho cómo una de las bombas que me despertó por la mañana atacó la casa de una familia amiga, la Daya. En la casa había 17 personas que han sido aplastadas. Me siento mal. ¿A quién puedo dar mis condolencias? La familia entera ha sido masacrada.

La cabeza se me llena de ideas confusas. Sentimientos y muchas preguntas sin respuesta. ¿Cuántos muertos inocentes van ya? ¿Serán las ambulancias capaces de atender a los heridos o les volverán a disparar los tanques israelíes?

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Todos estos pensamientos y me acabo de levantar. Por supuesto que estoy enfadado y siento pena. Enfadado con los israelíes y la guerra que nos han traído. Y pena porque ¿quién se acordará de los muertos? ¿Quién se acordará de mí sí me matan?

No soy un terrorista. Tengo que ver los cadáveres de mis amigos y sus familiares víctimas de este bombardeo sin sentido. Tengo que ver desde casa cómo los perros se comen los cadáveres mientras los soldados israelíes se deleitan con sus hazañas. ¿No hace esto que un ser humano se llene de ira? ¿Hasta cuándo va a permitir el mundo que Israel continúe con su masacre contra un pueblo cuya culpa es su determinación por vivir libres? ¿Cuántas más mujeres y niños inocentes tienen que morir para que esto acabe?

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