Este artículo se publicó hace 12 años.
Wade se guarda un as en la manga
En su primera aparición tras los comicios del domingo, el presidente de Senegal ni confirma su victoria ni la pertinencia de una segunda vuelta
"Senegal ha dado una lección de transparencia y civismo en las elecciones. Os doy las gracias a todos los que habéis votado por mí y saludo al resto de compatriotas que han tomado otra decisión". Así comenzaba su discurso el presidente saliente de Senegal, Abdoulaye Wade, un día después de la primera vuelta de las elecciones presidenciales. "Con el 50% de las colectividades locales escrutadas (282 de 551 que conforman el total) puedo decir que voy en cabeza con un 32,17% y quien me sigue cuenta con un 25,24%. Todo es aún posible: tanto la victoria como la segunda vuelta", sentenciaba.
El hecho de que haya sido derrotado por el candidato de izquierda Moustapha Niasse en su propio colegio electoral, parecía decir muchas cosas ayer por la noche sobre el futuro del país, cuando las primeras tendencias repartían los votos entre Wade, Macky Sall y Moustapha Niasse. Aunque habrá que esperar hasta mañana para saber con exactitud el resultado final, el octogenario dirigente se ha guardado un as en la manga para los próximos días. A pesar de la alabanza a la transparencia y al control de las misiones internacionales, las tendencias que apuntaban a un supuesto fraude electoral se mantienen, aún más faltando un 50% de las colectividades locales por escrutar. Que Wade gane en la primera vuelta es un escenario muy difícil de aceptar por parte de la sociedad, sobre todo viendo a pie de urna los buenos resultados que han tenido tanto Sall como Niasse. De proclamarse su victoria muy probablemente volverían los disturbios al país y traerían consigo la inestabilidad y violencia del periodo pre electoral, que terminó con numerosos heridos y una decena de muertos.
Elecciones pacíficasMás de 5 millones de electores fueron llamados a ayer la cita para decidir el avenir el país bajo el lema "Mi carnet de elector, mi elección, mi futuro" y una gran expectación internacional. "Si Dios quiere habrá alternancia", decían algunos de los votantes a la entrada de los colegios electorales a expensas de lograr la salida del poder de Wade. En general, la jornada de elecciones transcurrió sin incidentes destacables, aunque la web senrevolution denunciaba varios casos de venta ilegal de carnés de elector así como de la insuficiencia de papeletas en algunos colegios. De igual manera, no se han producido incidentes en otros países en los que población senegalesa han llevado a cabo los votos, aunque algunos votantes denunciaban que sus cartas de elector no habían llegado a los colegios electorales. Fuentes de la misión de observación de la Unión Europea confirman que "todo se desarrolló con normalidad" y sólo hubo "pequeños incidentes" no resaltables.
Los indicios apuntan a que ese 25,24% corresponde a los votos logrados por Macky Sall, ex miembro del Partido Democrático Senegalés (PDS), que no presentaría una alternativa de cambio radical al actual presidente, ya que ambos se han curtido en el seno del mismo partido. Wade llegó al poder en el año 2000 gracias a la coalición de varios partidos en su favor que le otorgó un 58,1% de los votos. En 2007 fue reelegido en la primera vuelta con un controvertido 55,79% que ya tuvo especulaciones de fraude. Ahora busca la manera de perpetuarse en el poder después de validar una tercera candidatura no contemplada por la Constitución y a sabiendas de que la ira del pueblo nunca desembocará en un conflicto armado. "Senegal nunca podrá tener una guerra civil porque dentro de una misma familia hay seguidores de diferentes partidos. Además, se trata de una zona estratégica y estable en África occidental y no interesa que haya altercados", afirmaba a Público un reputado analista político senegalés.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.