Si las cosas no se tumban las próximas semanas, el 23 de diciembre se habrán aprobado tanto los presupuestos de la Generalitat como los del Ayuntamiento de Barcelona para el próximo año. Esta es la voluntad de Comuns, tal y como ha verbalizado su líder en el Parlament, Jéssica Albiach, en una rueda de prensa para detallar las claves del preacuerdo cerrado este lunes por la mañana con el Govern de la Generalitat para, de entrada, retirar la enmienda a la totalidad a las cuentas y, en las próximas semanas, cerrar un acuerdo definitivo. La votación definitiva los presupuestos de la Generalitat será el 23 de diciembre. 

"Acabamos de retirar la enmienda a la totalidad para permitir la tramitación de los presupuestos, después de llegar a un preacuerdo para tirar adelante los presupuestos, es un primer paso para seguir negociando", ha arrancado Albiach. La dirigente de En Comú Podem no ha escondido que el entendimiento también ha sido posible gracias al cambio de posición de ERC en Barcelona, ya que la formación dirigida por Ernest Maragall en la capital ha anunciado que, finalmente, facilitará la aprobación de las cuentas a la ciudad.

"Ante el cambio de paradigma económico, era necesario también un cambio de paradigma político y esto quiere decir negociar y dialogar entre diferentes. Hoy trabajamos para abrir un tiempo nuevo para Catalunya, lejos de las viejas inercias y poniendo nuestros diputados al servicio de mejorar la vida de la gente", ha expuesto la presidenta de En Comú Podem. 

Estas son las laves del preacuerdo sobre las cuentas conseguido entre el Govern y En Comú Podem:

Impulso del tren

Con la voluntad de avanzar hacia un nuevo paradigma de movilidad, basado en el tren, los comuns y la Generalitat han acordado impulsar proyectos como el tranvía del Camp de Tarragona, del Bages y el de la Costa Brava. También han insistido en la congelación de las tarifas del transporte público metropolitano -confirmada ya hace algunas semanas-, además de trabajar para desarrollar una red de Rodalies en Lleida, alargar la R8 hasta Vilafranca y recuperar el servicio del tren Avant desde Tortosa hasta Barcelona.

Energética pública y remunicipalización del agua

Como ya había acordado el Govern con la CUP, el pacto con En Comú Podem también contempla que el próximo año se pondrá en marcha una energética pública y, además, según ha detallado Albiach, se desarrollarán "11 comunidades energéticas". La otra novedad es que se creará una oficina para la remunicipalización de las aguas, que asesore y acompañe a los municipios que quieran pasar a tener una gestión totalmente pública del servicio.

Más recursos para la industria

La reindustrialización de Catalunya es otra de las patas del preacuerdo, que se materializará en que la inversión del pacto nacional por la industria pasa de un fondo de 50 millones a 76, además se destinarán más de 200 millones de inversión para la industria y las empresas, se aumentarán los recursos para la formación y también se destinarán más a la investigación, desarrollo y la innovación (I+D+I).

1.000 millones en vivienda

La partida de Vivienda será de las que más crecerán con los presupuestos de la Generalitat del próximo año, ya que se pasará de 300 millones a 1.000. Precisamente, esta es la cifra que había reivindicado la CUP las últimas semanas y a la cual ya había accedido el Govern. En el proyecto de presupuestos aprobado al Consell Executiu la cifra quedaba limitada a 750.

Sanidad

También está el compromiso de tirar adelante con la internalización de los servicios telefónicos del 061 y el 112, y Albiach ha asegurado que "en los próximos días tendremos un acuerdo para impulsar el psicólogo público y el dentista público", dos de las grandes demandas sanitarias de En Comú Podem.

En otro ámbito, también se creará un mecanismo para legalizar y dignificar el trabajo de cuidados y limpieza del hogar. Al mismo tiempo, Albiach no ha escondido que mantienen discrepancias en cuestiones importantes, como el proyecto de BCN World, que de momento el Govern mantiene vigente, y que negociarán este tema en las cuatro semanas que faltan para el debate final sobre presupuestos.