Este artículo se publicó hace 11 años.
Un guardia civil a unos mossos: "Así tenéis fama de torturadores"
El Supremo sanciona a un agente de Tráfico que tuvo un incidente con la Policía de Catalunya por exceso de velocidad: "No sabes ni saludar", le dijo al sargento que mandaba la patrulla
El Tribunal Supremo ha confirmado la sanción a un guardia civil de Tráfico por faltar gravemente al respeto a los agentes de los Mossos d'Esquadra que le detuvieron en una autopista catalana por exceso de velocidad, a los que recordó su "fama de torturadores" y, como remate, les criticó por no saber saludar correctamente.
La sentencia ilustra la reacción de un guardia civil cuando él es el multado por infracción de tráfico, y no al revés, como es habitual. Los hechos ocurrieron a las 18.30 horas del 30 de abril de 2010. Agentes de los Mossos ordenaron detenerse a Ramón Vicente Sánchez en un área de servicio de la autopistas A-7, tras constatar que había superado el límite de velocidad con su vehículo.
El hombre iba de paisano, y no estaba de servicio, pero, al ser parado, hizo saber a los mossos que era agente de Tráfico de la Guardia Civil.
A continuación, "gesticulando en voz alta", dirigió al sargento de la Policía catalana que le había ordenado detenerse expresiones tales como:"¿Qué quieres, por qué me paras? ¿Qué pasa, que no se puede adelantar por la izquierda? Yo chillo a quien me da la gana y a mi tú ni nadie me va a decir cómo me tengo que comportar". Y añadió: "Luego dirás que eres compañero mío, si alguna vez vienes por Benidorm te vas a enterar, así tenéis fama de torturadores".
Personada una segunda dotación policial en el lugar de los hechos, el denunciado, en presencia de la misma, volvió a dirigirse al mismo sargento diciéndole: "¿Qué, acabas de salir de la escuela? ¿Qué, te han regalado los galones?" "Son los típicos que no tienen ni idea y van de jefes". Para posterioremtne dirigirse a dos agentes, y decirles: "Vaya jefes que tenéis, vais arreglados".
Ha quedado probado que, una vez extendido el boletín de denuncia, el sargento se despidió del denunciado realizando el saludo de rigor, momento en el que éste dijo a aquél: "Saluda bien, coño, que no sabes ni saludar".
La sanción para el guardia civil que ahora confirma la Sala Militar del Supremo es de pérdida de cinco días de haberes y suspensión de funciones por el mismo motivo, aunque previamente un Juzgado civil de Tarragona le impuso una multa de 200 euros por una falta de orden público del Código Penal. Todo ello, aparte de la sanción económica por exceso de velocidad de la que se habla en la sentencia.
El Supremo subraya que el guardia no sólo se permitió corregir la actuación de la dotación policial sino que la ridiculizó, "faltando claramente al respeto a sus componentes, tildando de ignorantes a los "jefes" e incluso reprochando la, a su juicio, indebida forma de saludar por parte del Jefe de la Fuerza actuante".
"Estos hechos han originado un daño moral a la Administración, habida cuenta que al trascender, por voluntad del propio implicado, su condición de Guardia Civil, se ha empañado públicamente la imagen del Instituto Armado", añade el alto tribunal.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.