La devoción religiosa de Jorge Fernández Díaz, ministro del Interior, ha quedado plasmada en diferentes ocasiones en los últimos años, llegando a condecorar con la Medalla de Oro al Mérito Policial, con carácter honorífico, a la virgen María Santísima del Amor.

El ministro del Interior, que acude a misa diariamente, ha vuelto a evidenciar su fervor religioso, esta vez en una entrevista en La Vanguardia, donde asegura que tiene un ángel de la guarda que se llama Marcelo y que le ayuda, por ejemplo, "en pequeñas cosas, como aparcar el coche".

Fernández Díaz confiesa su creencia en que todo está escrito, "nada de lo que suceda es casual, ¡todo responde al plan de Dios!. Él nos ha hecho libres para que actuemos... pero Él tiene un plan B, y por eso 'casualidad' es sólo un pseudónimo de Dios."

Después de confesarse evolucionista, "porque creer en Dios no contradice la razón", el ministro ha dejado una de las reflexiones más destacadas de la entrevista. Cuestionado por una hipotética situación en la que tuviera un hijo homosexual, Fernández Díaz asegura que "me llevaría un disgusto, la verdad, pero estaría a su lado, ayudándole como padre".

El ministro del Interior también ha respondido sobre varias cuestiones de actualidad política. Sobre la posible independencia catalana, ha afirmado que "sin Catalunya, España dejaría de ser España. Fuera de España, Catalunya dejaría de ser 'rica y plena', sería a su vez otra cosa".

Cuestionado por las puertas giratorias, ha asegurado que en ese tema "estoy de acuerdo con Podemos. Hay que legislar contra las puertas giratorias, ¡pero incluyendo también a los jueces!. Porque Podemos lleva a dos jueces en sus listas, y un juez es más poderoso que un político: ¡un juez puede volver a su cargo y privarte de tu libertad, el bien supremo!".