Dos años. Es el plazo que da el Partido Nacionalista Vasco al Partido Socialista para que se traspasen todas las competencias pendientes a Euskadi y, así, se "culmine el autogobierno vasco", tal y como señala el acuerdo de investidura entre ambas formaciones, al que ha tenido acceso Público. Es solo uno de los puntos de un documento de 10 páginas en el que ambas fuerzas ponen negro sobre blanco los compromisos que adquiere el PSOE para allanar, de forma definitiva, el camino hacia la investidura de Pedro Sánchez, prevista para los días 15 y 16 de noviembre.

"Es un acuerdo bueno para Euskadi", ha terciado Andoni Ortuzar, presidente del PNV, tras estampar su firma en el documento. Y, en clave nacional, el ánimo de su partido, tal y como él mismo ha afirmado, es dar estabilidad al Gobierno. "Si se cumple lo pactado, el PNV estará a las duras y a las maduras", ha zanjado. El acuerdo contempla revisiones "cada seis meses" para examinar si el ritmo de ese traslado de competencias —que debe consumarse en dos años— es el adecuado.

El pacto, que, según fuentes del PNV se cerró poco antes de la una de la madrugada de este viernes, también abarca la cuestión nacional. En concreto, ambas formaciones acuerdan avanzar en el autogobierno con la creación de una comisión bilateral "para el seguimiento e impulso de los hitos comprometidos". Esos "hitos" son el "reconocimiento nacional de Euskadi", la "salvaguarda de las competencias vascas" y un sistema de garantías "basado en la bilateralidad y la foralidad".

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También figura en el texto un compromiso de que, en el caso de que aparezcan "obstáculos legales" que impidan "un mayor ejercicio de autogobierno" se llevarán a cabo las medidas necesarias para superarlos. Las tres prioridades que establece el acuerdo en este sentido son abordar el traspaso de los ferrocarriles, la homologación y convalidación de títulos extranjeros y transferir a Euskadi las fórmulas correspondientes para la financiación y transferencia de los procesos de inclusión contemplados en el sistema estatal de acogida.

También en el ámbito laboral cosecha un acuerdo el PNV. Además, tal y como el propio Ortuzar ha enfatizado en rueda de prensa, es un beneficio el PNV no pudo obtener en las negociaciones para la reforma laboral. Se trata, concretamente, de la prelación de los convenios de Euskadi sobre los nacionales.

Concierto vasco y fuerza para la Ertzaintza

El acuerdo amplía, también, algunos límites del concierto vasco. Son varios los puntos en el apartado de economía y fiscalidad del acuerdo, pero lo más relevante tiene que ver con el fortalecimiento del poder y el control vasco sobre los impuestos y la diferenciación de límite de deuda entre el Gobierno de Euskadi y las diputaciones forales. También se compromete el PSOE a dar más competencias a la Ertzaintza, la policía autónoma de Euskadi.

En el plano nacional, los vascos han introducido en el texto un punto para obligar al próximo Gobierno de coalición a comprometerse y no utilizar la fórmula del Decreto-Ley más allá de cuando se trate de un caso “excepcional” y de “urgente necesidad”.

Con todo, PSOE y PNV se comprometen a "negociar de buena fe" el fortalecimiento de la nación vasca, por un lado, y a facilitar que la legislatura sea lo más estable posible, por otro. Ortuzar se ha abierto, incluso, a apoyar los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE). “Habrá que negociarlos, pero lo natural es apoyarlos”, ha deslizado.