En un discurso muy breve, pero muy claro, el nuevo secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, fijó ante su grupo parlamentario lo que es claro objetivo político: “La prioridad es cambiar al Gobierno”, afirmó.

Para ello, Sánchez sigue en su idea de que puede ser posible con una alianza conjunta con Podemos y Ciudadanos pero, paso a paso. Y el primer movimiento es poner ya en marcha lo que denominó la “mesa del cambio” con estos dos partidos para definir un programa de medias de “abajo a arriba”, para buscar los puntos que unen a las tres formaciones y para empezar a avanzar conjuntamente.

En este sentido, Sánchez se dirigió a Podemos y a Ciudadanos y les preguntó cuánto creen que pueden avanzar juntos, “diez metros, cincuenta metros, cien metros… ¿podemos llegar a La Moncloa juntos? Esa es la propuesta que queremos hacer”, reiteró.

El líder socialista indicó que quiere ponerse ya a la tarea, y esta misma semana pedirá reunirse con Pablo Iglesias y Albert Rivera (“juntos o por separado, como ellos quieran”, dijo) para plantearle dicha propuesta y empezar a trabajar ya con medidas concretas.

Sánchez indicó que el PSOE planteará como primera propuesta para abordar conjuntamente un plan de rescate de los jóvenes españoles donde se aborde, entre otros temas, la regulación del becariado, los trabajos no remunerados, la rebaja de las tasas universitarias o medidas para la emancipación de la gente joven. Pero el líder socialista indicó que están abiertos a todas las propuestas y a todas las opciones, “no aspiramos a monopolizar ni a patrimonializar nada”, añadió.

Sánchez quiere que sobre este plan de rescate para los jóvenes se empiece a trabajar la próxima semana, si cuenta con el compromiso de Podemos y Ciudadanos de involucrarse en esta iniciativa, pero apuntó que la agenda puede ser mucho más amplia.

El líder socialista reiteró que hay que acabar cuanto antes con el Gobierno que, según dijo, ampara la corrupción, la impunidad y la falta de ejemplaridad en la política, “y si Rajoy me pide moderación, yo le pido decencia y ejemplaridad”.

Sánchez dio las gracias a la labor que habían hecho los portavoces nombrados por la Gestora y reconoció que su trabajo ha sido “en unas circunstancias muy difíciles”. Eso sí, se vio obligado hasta pedir a sus diputados un aplauso para ellos.

Antes de la entrada de Sánchez, fue ratificada por asentimiento las nuevas direcciones de Congreso, Senado y Parlamento Europeo, sin una voz en contra. La reunión siguió a puerta cerrada.