17 fallecidos en la jornada más represiva contra las protestas en Perú

La brutal represión del Gobierno de Dina Boluarte ha provocado también detenciones masivas y ha agravado una crisis ya en escalada. Se contabilizan al menos 45 muertes desde su toma de posesión y, tras un diciembre crítico, el inicio de año no arroja soluciones definitivas. El intento de consolidación del modelo de gobernanza del país, una reunión denominada Acuerdo Nacional, entre distintos actores políticos y el Gobierno, fue suspendida tras conocerse las primeras muertes. La ciudadanía que protestaba, unas 9.000 personas, según las cifras oficiales, ha sido tildada por el primer ministro, Alberto Otálora, como "hordas de delicuentes". Los manifestantes denuncian que la policía peruana utiliza munición como "balas y perdigones" contra ellos e, incluso, contra los sanitarios que atienden a los heridos.