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Barcelona amplía sus recursos contra los desahucios

Durante 2022, el Servicio de Intervención en Procesos de Pérdida de la Vivienda y Ocupaciones consiguió suspender 9 de cada 10 desahucios

Una calle en el distrito de Ciutat Vella de Barcelona.
Una calle en el distrito de Ciutat Vella de Barcelona. Ajuntament de Barcelona

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La situación económica y las dinámicas del mercado inmobiliario han provocado que muchas personas vivan en condiciones inadecuadas, hayan perdido su vivienda o estén en riesgo de hacerlo. Con el fin de defender los derechos de estos colectivos, el Servicio de Intervención en Procesos de Pérdida de la Vivienda y Ocupaciones (SIPHO) va a reforzar este año sus servicios de mediación en desahucios incrementando su equipo.

EN 2022, el servicio municipal de mediación en desahucios atendió 1.881 familias nuevas

Los 43 profesionales que trabajan ya en este asesoramiento, frente a los 16 que había hasta la fecha, podrán mediar e intervenir para conseguir que las familias se puedan quedar en sus casas. Y es que el objetivo del SIPHO es, siempre que sea posible, que las familias puedan quedarse en la vivienda de manera estable a través del acuerdo con las propiedades. En 2022, el el 87% de los desahucios de familias en situación de vulnerabilidad con el acompañamiento del SIPHO no llegaron a producirse.

Este servicio municipal de mediación en desahucios media entre los juzgados, la propiedad inmobiliaria y las familias afectadas. Integrado, además, en las oficinas de vivienda de la ciudad, durante el año pasado consiguió suspender el 77% de los procesos de desahucio antes del día señalado. Y un 10%, se detuvieron en la puerta.

Imagen de unos portales en una calle de Barcelona.
Imagen de unos portales en una calle de Barcelona. Ajuntament de Barcelona

Más recursos y tiempo

Una de las novedades del SIPHO este año, además de la ampliación del equipo, es la incorporación de un equipo jurídico propio. Así, se va a reforzar el equipo de profesionales de la mediación y la prevención con más herramientas para poder atender los recursos con más garantías.

Las familias también dispondrán de un único profesional de referencia en todo el proceso. Se prevé así reducir la angustia y la incertidumbre que supone el proceso de pérdida de la vivienda para los afectados.

Pasar de 16 a 43 profesionales va a permitir, asimismo, que cada uno de ellos pueda dedicar más tiempo y recursos a estudiar cada caso y preparar mejor la respuesta activando todos los procedimientos disponibles como las ayudas al pago del alquiler o la entrada a programas sociales como la bolsa de alquiler municipal.

Más de 1.800 familias atendidas en 2022

El año pasado el servicio municipal de mediación en desahucios atendió 1.881 familias nuevas, que representan un total de 4.357 personas, una tercera parte de las cuales son menores de edad. El 49% de estas familias se encontraba en un proceso de desahucio impulsado por grandes tenedores. Es decir, sociedades y entidades financieras o bien particulares con más de diez o quince pisos.

El 40% de estos procesos se debieron al impago del alquiler, el 30% a la ocupación sin título habilitante, el 14% a la finalización del contrato de alquiler y, finalmente, el 4% a ejecuciones hipotecarias.

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