La Gran Festa de la Calçotada de Valls, una cita obligada para disfrutar de una buena degustación de calçots

La ciudad catalana de Valls, capital de la comarca del Alt Camp (Tarragona), celebra este domingo la Gran Festa de la Calçotada, que da pistoletazo de salida a la temporada de los calçots en Catalunya. La fiesta rinde homenaje a esta popular cebolla dulce y se consolida como una de las citas más importantes del calendario gastronómico de Tarragona. Esta celebración reúne cada año a más de 30.000 personas.

Este fin de semana arranca la edición número 41. Entre las novedades, se presenta un recorrido urbano que conecta varias plazas de la localidad, como el Blat, el Oli y el Pati, con la nueva zona de degustación de calçots, ubicada en la explanada de la Sociedad Agrícola de Valls.

Dicen que Valls es un pueblo que mira al cielo por tres razones: para contemplar el campanario más alto de Catalunya, para ver cómo sube la enxaneta de un Castell -niña o niño que corona un castillo humano- y para degustar esta típica cebolla alargada. En la Gran Festa de la Calçotada se degustan cerca de 60.000 calçots, acompañados de la tradicional salsa de calçot (que no romesco). Uno de los momentos más esperados de la cita es el concurso, donde los participantes se pondrán a prueba intentando comer el mayor número de calçots posible en un tiempo concreto. El año pasado, el ganador se zampó un total de 192 unidades, lo que equivale a 2,7 kilogramos.

Además de este certamen, en la plaza del Pati tendrán lugar otros concursos, como el de cultivadores de calçots y el de la mejor salsa de la calçotada, entre otros. Mientras tanto, en la plaza del Oli se harán demostraciones sobre cómo cocer calçots a la parrilla.

¿Dónde disfrutar de una buena calçotada?

No es raro que después de la Gran Festa de la Calçotada te quedes con ganas de más. En la comarca del Alt Camp, como en el resto de Catalunya, hay numerosos restaurantes que incluyen en su carta un menú con la calçotada tradicional, también para personas veganas. Te proponemos varios lugares donde puedes hartarte de esta cebolla dulce.

Cal Ganxo es el restaurante de calçotadas por antonomasia en la provincia de Tarragona. Lo encontramos en Masmolets, un pequeño núcleo que pertenece a Valls, en el interior de una antigua casa solariega del siglo XVIII. Es el único del municipio, y también de toda Catalunya, que sólo abre cuando es temporada de calçots. Puedes comer tantos como quieras y probar la auténtica salsa que elaboran a partir del producto.

A veinte kilómetros de Valls, encontramos El Molí del Mallol, en la ciudad amurallada y medieval de Montblanc (Conca de Barberà). En 2018, este establecimiento logró ser el mejor restaurante de calçotadas del Camp de Tarragona en el programa Joc de Cartes, de TV3. La cocina tiene toques de autor pero sin perder la esencia tradicional de una buena calçotada.

Para terminar, regresamos a Valls, donde está Casa Fèlix, un clásico de la zona y uno de los primeros restaurantes en ofrecer calçotadas multitudinarias. Es conocido por las inmensas tinas de madera que hay en el exterior del local.

20 millones de calçots

La Indicación Geográfica Protegida (IGP) Calçot de Valls está formada por 55 productores de las comarcas del Alt Camp, Baix Camp, Tarragonès y Baix Penedès. Después de dos años a medio gas por las restricciones de la pandemia, los agricultores de esta zona esperan producir esta temporada 20 millones de calçots, una cifra que confirmaría la total recuperación del sector y que sembraría un récord sin precedentes.