El Gobierno tiene previsto iniciar el registro estadístico de las mujeres asesinadas por hombres que no pertenecen al entorno íntimo de la pareja o expareja a partir del próximo 1 de enero de 2022. Así lo ha anunciado este viernes en rueda de prensa la delegada del Gobierno contra la violencia machista, Victoria Rosell. 

En una rueda de prensa en la que presentó la campaña Juntas del ministerio de Igualdad contra las violencias machistas que se celebra este próximo 25 de noviembre, la delegada del Gobierno afirmó que "se trata de una deuda y de un compromiso que se arrastra desde hace años" y que el Gobierno la va a llevar a cabo "desde el próximo año". 

Aunque aún no está totalmente definida la forma o las subcategorías de este nuevo registro estadístico, Rosell afirmó que los planes están muy avanzados y que ya hay algunas cuestiones claras. Una de ellas es que se mantendrá de forma separada la actual estadística sobre víctimas de violencia de género (la que ocurre en el ámbito de la pareja y expareja de las mujeres) cuyo cómputo se lleva a cabo en nuestro país desde el año 2003, y es un "referente europeo e internacional porque España es el único país de nuestro entorno que lleve más de 15 años recopilando estos datos", explicó Rosell. 

A esta estadística se añadirán otras grandes categorías, que serán la de los asesinatos por violencia sexual, en la que se incluirían los asesinatos vinculados a situaciones de explotación sexual y trata, es decir todas aquellas ya contempladas en la ley de garantía integral de la libertad sexual. Según esta categoría, asesinatos como el de Laura Luengo o de Diana Quer entrarían en las estadísticas. 

También habrá un categoría para los asesinatos en el ámbito familiar, siempre que ésta sea ejercido por los hombres hacia las mujeres y otra sobre la violencia social, siempre que tengan razón de sexo. "La excepción al género sería la categoría de violencia vicaria, que afecta a los hijos y que es utilizada por los agresores para infringir el mayor dolor que puedan hacia las madres", afirmó Rosell. 

Un compromiso largamente esperado

La ampliación de las estadísticas de feminicidios no es nueva y ha sido una reivindicación largamente solicitada por el feminismo. En el año 2018. a raíz las movilizaciones y protestas tras los asesinatos de Diana Quer y de Laura Luelmo por violencia sexual (que no subieron a las estadísticas oficiales), la entonces delegada del Gobierno y hoy ministra de Justicia, Pilar Llop, ya anunció la puesta en marcha de la recolección de datos para ampliar las estadísticas de las mujeres asesinadas por cuestión de género por hombre distintos a los de la violencia íntima. Los trabajos, sin embargo no se pudieron poner en marcha en la anterior legislatura.

La necesidad de ampliar la recolección de estadísticas sobre la violencia machista está contenida en el Convenio de Estambul y también en el pacto de Estado que los distintos grupos parlamentarios aprobaron en el Congreso de los Diputados en 2017. 

Rosell explicó que no ha sido sencillo avanzar en este plan de ampliar las estadísticas y afirmó que desde el verano la delegación del Gobierno ha estado trabajando y consultando con diversos expertos para establecer un sistema de categorías y subcategorías para este registro. Entre los que han participado en su definición figuran expertos como Graciela Atencio, responsable de Feminicidio.net; el exdelegado contra la violencia de género, Miguel Lorente; la fiscal de violencia contra la mujer, Teresa Peramato o el observatorio estatal de violencia sobre la mujer.