El día que Miguel Maldonado dibujó un pene gigante en la redacción de 'Público' ante la mirada atónita de Iñaki Gabilondo

El dibujo esquemático de un pene es al aburrimiento lo que el bisonte a las pinturas rupestres. Un trazo puramente intuitivo, apenas un bosquejo, un alarido primario de lo que nos define como seres humanos; a caballo siempre entre la estupidez y la creatividad.

Lo que se viene le ocurrió al humorista Miguel Maldonado en la redacción de Público. Por aquel entonces el reconocido cómico murciano hacía las veces de realizador. Una labor que si bien siempre desempeñó con máxima dedicación, aquella tarde, por lo que fuere, no conseguía saciar sus anhelos creativos. Así lo cuenta en la Cadena Ser.

Fue entonces cuando Maldonado decide dar rienda suelta a sus aptitudes plásticas, no en vano el humorista es, además de profesional del chascarrillo, licenciado en Historia del Arte. Quizá imbuido por reminiscencias de carácter académico, quizá guiado por el caballo loco de la inspiración, Maldonado tuvo a bien dibujar tremendo pene (con su esmegma de rigor para dotarlo de cierto realismo) en una pequeña pizarra que había en el plató.

El caso es que el azar, lo infausto, la posibilidad de lo grotesco, se aunaron una vez Maldonado hubo finalizado su dibujo y la figura de Gabilondo –invitado a la redacción– se posó tras él y su obra. El resto se lo pueden imaginar. Dos mundos en colisión. El rigor periodístico se dio de bruces con el bochorno. La mirada de Gabilondo escrutando el signo instintivo de un rabo, y un cómico todavía en ciernes, que, lejos de justificar su creación, optó por un escandaloso silencio. La vida misma.

Tremending se ha puesto en contacto con el insigne periodista para conocer de primera mano sus impresiones sobre aquel rocambolesco episodio. Gabilondo ha confesado no recordar el instante de marras, justificando su desmemoria en base a la edad que profesa. "La culpa no la tiene ni Maldonado, ni el pene, la culpa es que yo estoy en una edad muy difícil para recordar cosas", ha alegado el periodista.