/ Cultura

Rosalía
Foto: La Trinchera
Rosalía
Rosalía ha demostrado a lo largo de sus casi 10 años de carrera que es una estrella. (Foto: EuropaPress)

Marta Salicrú: «Hay una serie de elementos que definen cómo debe ser un artista perfecto en el siglo XXI y Rosalía cumple todas las condiciones»

UwU entrevista a Marta Salicrú, la escritora de la biografía de “Rosalía de la A a la Z”, donde explica qué ha llevado a la artista catalana a convertirse en un icono en todo el mundo.

Helena Celma

Si hay una artista diferencial en España, esta sin duda es Rosalía. Los números avalan su éxito, con 34 millones de oyentes mensuales gracias a los tres álbumes de estudio publicados  –Los Ángeles, El Mal Querer y Motomami- y el resto de singles que han alcanzado las zonas más altas de las listas musicales. Pero su trascendencia va más allá de lo musical, y es que incluso el presidente de Sony Music España y Portugal, José María Barbat, la elevó a “referente global”. «Lo más parecido que habíamos tenido años atrás era Julio Iglesias. Pero en las nuevas generaciones, en los millenials y la Generación Z, Rosalía es un ejemplo de lo que desde España se puede hacer en mercados internacionales”, comentaba en una entrevista

Lo que está claro es que la artista de Sant Esteve Sesrovires marcó un antes y un después en la industria musical española. Estamos acostumbrados a que los fenómenos globales sean americanos o de otros países de habla inglesa, pero no lo estamos tanto a que un producto nacional se convierta en una estrella internacional. 

¿Cómo ha llegado a este nivel de relevancia en todo el mundo? Esto es algo que la barcelonesa Marta Salicrú intenta responder en su biografía no oficial, Rosalía de la A a la Z. Para este libro, la periodista ha destinado todo un año en lo que ha servido prácticamente como una biblia para entender el universo de Rosalía. Tal y como expresa su canción Abcdefg, Salicrú ordena en su diccionario particular todo lo que se necesita para asimilar el universo artístico que la envuelve y aquello que la convierte en una artista internacional.

Marta es una de las personas quizá más indicadas para poder hacer esta recopilación, ya que sigue a Rosalía desde 2016, antes incluso de que publicara Los Ángeles, y ha tenido la oportunidad de entrevistarla y hablar con ella varias veces. Este encargo de la editorial Libros Cúpula es algo que aceptó encantada.

¿Cómo es Rosalía en la distancia corta?

Cuando aún no era una estrella internacional, era una persona que tenía un discurso artístico muy bien articulado, una visión muy clara a pesar de ser muy joven, y también transmitía una calidad que la distinguía. He entrevistado a centenares de artistas y pocos me han dado esta sensación de tener a alguien que realmente es una estrella, y con ella me sucedió, a pesar de que no había publicado ningún álbum todavía. También destacaba por su cercanía, algo que parece antagónico, pero ella lo encarna.

¿Cómo se explica la relevancia que ha tenido Rosalía en la cultura española y el salto que ha dado al resto del mundo? 

Porque es una artista que ha encajado. En el libro cito un artículo que define el carácter de la “estrella” como un talento que encaja en un momento y en un tiempo adecuado. Es lo que ha sabido hacer Rosalía, que al margen de ser una artista con mucho talento, la manera de expresarlo ha sido algo que ha entrado en perfecta sintonía en el momento actual, tanto por su manejo de redes sociales como por el hecho de saber avanzarse a tendencias justo antes de que estallen. 

También sabe comportarse como una líder de su propio proyecto.Tenía clarísimo que su agencia debía mantener la toma de decisiones por encima de todo, y supo rodearse de personas y artistas de otras disciplinas que supieron ayudarle a comunicar su visión. 

Hay una serie de elementos que definen cómo debe ser un artista perfecto en el siglo XXI, y ella cumple todas las condiciones, y le salen de forma natural, sin forzarlos. No hay una estrategia maquiavélica, nada de eso. Si hubiese nacido en otra época no habría conseguido tal éxito porque la gente no estaría aún preparada para ella. 

Relacionado: Karol G, Rosalía y la acusación de plagio a ‘Despechá’

Rosalía rompió todos los esquemas con El Mal Querer a pesar de no ser muy conocida hasta ese momento. ¿Hay algún precedente de éxito como el que tuvo ella?

Imagínate, cuando sale Malamente está licenciado por Sony, pero no tiene nada firmado con ningún sello discográfico. Nadie había apostado aún por ella y es ella que tiene clarísima su visión y, en ese momento, enrola una serie de colaboradores sin que haya un gran presupuesto detrás. Primero le llega el éxito y es después que le viene el apoyo multinacional, por lo que puede continuar haciendo crecer su proyecto. Al final, El Mal Querer era tan solo un trabajo de fin de grado.

La historia de amor que tuvo con C.Tangana y el tema de Antes de Morirme que hicieron juntos ha influido también en su instalación en el imaginario de la cultura zeta?

Rosalía utiliza la música para comunicarse y cada uno puede interpretarlo como quiere. Particularmente, el libro trata de su universo artístico y su trayectoria. Es cierto que también he mencionado los elementos de su vida personal porque se entrecruzan con su trayectoria artística. Por ejemplo, uno de los puntos de partida de su carrera fue la colaboración que hizo con C. Tangana, Antes de morirme. Es a partir de ahí que transito su vida privada, de la misma forma que es a través de la entrada de RR, donde trato su relación con Rauw Alejandro. Por mi parte, ha habido una intención deliberada de no detenerme en quienes considero que son personajes secundarios de su main character. 

Hay mucha gente que en su momento criticó que pasara de El Mal Querer a canciones más comerciales. ¿Se entienden estas críticas? Al final, un artista necesita renovarse o morir.

Para ella, el elemento del riesgo y la transformación son cruciales para entender lo que es su discurso artístico. Tengo la sensación de que es una artista que se irá transformando en cada uno de sus proyectos. Tampoco creo que después de El Mal Querer tomase un rumbo más comercial, porque es cierto que Con Altura fue una de las canciones de más éxito de su trayectoria, pero después vienen A Palé, TKN… con un registro muy distinto al de El Mal Querer, pero muy a la vanguardia. Son canciones que si entraban en la radiofórmula, era porque las había hecho Rosalía, y no al revés. 

Rosalía también destaca por la imagen que da de cercanía. Así lo deja claro en canciones como Aute Cuture (“sonando en las peñas y en los Hamptons/ sangría y Valentino / en el Palace y en el chino). ¿Es parte de su éxito?

La sensación que da es que ve la música como una manera de conectar. Muchos artistas buscan precisamente esta conexión que necesitamos las personas como seres sociales. Hay artistas que utilizan su discurso artístico para satisfacer esta voluntad de comunicarse con otras personas y ella, a parte de hacerlo con sus canciones, también consigue conectar mediante la atención que dedica a sus fans cuando se acercan a saludarla.

Motomami es el tercer y último álbum de Rosalía, pero es mucho más que un nombre, es un concepto. ¿Qué significa ser una ‘motomami’?

Ella publicó lo que los fans llamaron los ‘20 mandamientos de una Motomami’. Al final, se utiliza el término como un espejo de lo que es Rosalía para que cualquier persona pueda reflejarse en ello. Es una persona que toma sus propias decisiones, que tiene agencia, que tiene fuerza, que tiene sentido del humor, porque hay mucho de ello en el álbum de Motomami. Es alguien que es capaz de dar el 100% de sí misma, como si le fuera la vida, y a la vez, no tomárselo demasiado en serio. 

Esta es una contradicción, pero también hay muchas otras en dicho álbum. Esto es clave para entender en el disco. Precisamente, el concepto de “motomami” hace referencia a “moto”, que es energía y sirve para tirar adelante, mientras que “mami” es algo más tierno y más pasivo. Es una manera muy clara de resumir la contradicción, que es algo que está muy presente en todo el disco. 

Relacionado: Rosalía lanza ‘Omega’, su nueva canción con Ralphie Choo con la que deja atrás su era ‘Motomami’

Uno de los elementos más presentes en la discografía de Rosalía es su creencia en Dios.

Es evidente en el momento en el que incluye el audio de su abuela en el final de ‘G3N15’, en el cual queda claro que Dios es importante para parte de su familia. Esto también dice algo más de la libertad de Rosalía y de su idiosincrasia. Quizá en un momento en el que a alguien le pueda chocar que Rosalía sea creyente por la idea que se tiene de ella, a la artista le da igual la imagen que el resto tiene de ella. Rosalía es como es, y lo es en libertad, y lo continuará siendo al margen de lo que el resto creemos que debe ser.

¿Qué impacto ha tenido en la moda?

Es una artista que tiene muy claro que la imagen es un elemento más de su proyecto artístico. Es alguien que disfruta con la moda y que la considera un elemento más para transmitir su personalidad artística. Todas las personas interesadas en la moda consideran que es una vía más de expresión de su personalidad y ella lo utiliza para transmitir su discurso artístico. 

En estas transformaciones que hemos ido viendo a lo largo de sus álbumes, lo hemos podido apreciar. Por ejemplo, la sobriedad aflamencada que ponía en práctica en Los Ángeles, esta imagen más urbana y próxima al imaginario de periferia en las que se ubicaban muchas de las canciones de El Mal querer  y después el elemento vanguardista que tenía Motomami y que se veía desde el principio. Veíamos que ahí había algo, que no buscaba una imagen natural, sino algo que transmitiera una imagen rompedora. Al ir escuchando las canciones del disco, vimos que encajaba muy bien con esta imagen.

¿Cómo ha influido ella en el resto de panorama musical?

Es algo que iremos viendo con el tiempo, pero digamos que Rosalía deja muy claro a cualquier artista que venga detrás que sea cual sea su presupuesto, tiene que presentar un proyecto artístico que no puede limitarse tan solo a lo musical. Tiene que estar trabajado de manera 360º. También incide en la idea de buscar colaboraciones con artistas de otras disciplinas que también estén empezando y que puedan ayudarse y nutrirse los unos con otros para poder hacer crecer sus proyectos, ya sea una grabación de vídeo, un artista que pueda contribuir a la identidad gráfica, o la figura del estilista que ayude a que la imagen del artista transmita lo que dice su discurso artístico. 

También permite soñar, porque si una artista de Sant Esteve Sesrovires ha llegado donde ha llegado ella trabajando mucho, y estando particularmente dotada, otras personas también pueden soñar con conseguirlo. El artista debe vender una visión y si la tiene, seguirla.