La representación LGTBIQ+ en el deporte: valientes que se atrevieron a dar el paso
La lista de deportistas de élite que han hablado abiertamente de su orientación sexual no es muy extensa, aunque se espera que eso cambie en los siguientes años.
Helena Celma
El deporte ha sido un mundo asociado tradicionalmente y de forma mayoritaria a los hombres. También a aquellos valores o características asociados a la masculinidad. Debido a este contexto, todavía sigue habiendo reparos cuando algún deportista de élite sale del armario y decide dar el paso de dejar de esconder su condición de homosexual. Porque decir la verdad en este sentido puede ser liberador, pero el temor a que se vuelva en contra es una losa en la mayoría de casos.
La realidad es que, para los hombres, hay un estereotipo persistente de que ser gay es incompatible con ser "fuerte" o "atlético”. Y el panorama de las mujeres es a veces incluso más desolador, ya que se enfrentan al desafío de la doble discriminación por su género y orientación sexual.
Al final, el mundo del deporte es un reflejo de la sociedad en la que vivimos. Cuanto más avanzada y más abierta es, menos discriminación tendrá lugar... O, al menos, así debería ser. Pero por desgracia, la cultura del odio está aún muy extendida. Es algo que podemos comprobar a diario por las escenas que vemos de insultos y discriminación por la orientación sexual de algunas personas.
El fútbol, uno de los focos de homofobia
El fútbol es uno de los deportes más practicados en todo el mundo. Según datos de la FIFA del 2023, existen 128.694 futbolistas profesionales en todo el mundo, y en esa cifra no están incluidos los niños y niñas o jóvenes federados. Esto nos da una ligera perspectiva de la trascendencia que tiene el fútbol en la sociedad. Es por ello que cada pequeño paso que se da adelante en este ámbito, es aún más celebrado.
No es muy extensa la lista de jugadores que han dado el paso para declarar su orientación homosexual. El primero de todos fue el inglés Justin Fashanu en 1990. Su anuncio marcó un antes y un después, pero también fue devastador para su carrera y vida personal. Fashanu se enfrentó a una tremenda escalada de homofobia, tanto dentro como fuera del campo, lo que eventualmente lo llevó tomar la decisión de quitarse la vida en 1998.
Afortunadamente, no todos los ejemplos son tan duros ni tienen un final tan trágico. En 2021, el australiano Josh Cavallo fue uno de los que se atrevió a declarar públicamente su orientación homosexual, convirtiéndose así en el primer futbolista en activo en reconocer su homosexualidad. A pesar de haber declarado que ha sufrido homofobia desde que dio el paso, se ha mostrado feliz de haber ayudado a la causa y haberle dado visibilidad. Además, le pidió matrimonio a su pareja en el estadio del equipo en el que juega, el Adelaida United.
El joven inglés Jake Daniels fue el siguiente en hacer lo propio al año siguiente, y el último en hacerlo fue Jakub Jankto en 2023, con el objetivo de que se normalice cada vez más estas situaciones. Sin embargo, cada jugador que se declara abiertamente gay acaba recibiendo insultos en los estadios. Y eso es algo que no se puede consentir.
El problema de la homofobia, especialmente en el fútbol, viene de la hipermasculinidad que se asocia con este deporte. Tal y como definió el jugador Héctor Bellerín, “en el fútbol hay mucho miedo a cambiar y eso provoca una hipermasculinización tóxica”. Al final, no es tan distinto de lo que estamos viendo en la política mundial: el miedo a ver todos los avances provoca que demasiadas personas se aferren a valores más tradicionales para sentirse más seguros. Sin embargo, todo evoluciona, todo cambia, y tarde o temprano, el fútbol también vivirá esta revolución. Sigue siendo extraño comprobar que en el mundo del fútbol el número de personas homosexuales es proporcionalmente muy inferior al número de personas anónimas que se declaran gay en nuestra sociedad.
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Más allá del fútbol
A pesar de que el fútbol es uno de los deportes más problemáticos en este sentido, no es el único, porque es algo que se extiende en todo el deporte. Es por ello que atreverse a dar el paso es importante en cualquier disciplina.
Algunos de los deportistas españoles que también ‘salieron del armario’ fueron los siguientes:
Javier Raya (Patinador): En 2016, el patinador español Javier Raya hizo pública su relación con un hombre a través de una foto en Instagram. Aunque su intención no era hacer un anuncio oficial, su acción tuvo un impacto significativo en la comunidad deportiva. Además, no ha dudado en reivindicar que se debe huir del estereotipo de que todos los patinadores son gays, ya que el hecho de que un hombre tenga presencia en un mundo más asociado a lo ‘femenino’ no indica nada: “¿Por qué van a ser todos los patinadores gays y las futbolistas lesbianas? Sin duda, asumir eso es un claro caso de homofobia. Es verdad que los que somos gays en el mundillo del patinaje no tenemos problema en decirlo ni en vivir nuestra sexualidad abiertamente. Pero tenemos muchos ejemplos de grandes patinadores que no lo son”, comentaba en una entrevista en Shangay.
Víctor Gutiérrez (Waterpolista): En 2016, el waterpolista español Víctor Gutiérrez salió del armario, enfrentándose a insultos homófobos durante su carrera. De hecho, fue el primer caso que comportó una sanción por insultos en el waterpolo español. Todo se remonta al 2021, cuando jugando para el CN Terrassa, Víctor acusó a un jugador del CN Sabadell, Nemanja Ubovic, de haber proferido insultos homófobos. La Federación Española de Natación sancionó al jugador serbio con cuatro partidos de suspensión y una multa de 200 euros.
Carlos Peralta (Nadador): El nadador olímpico Carlos Peralta también declaró su homosexualidad en 2018. Junto a Gutiérrez, protagonizó una fotografía reivindicativa en la que se besaban, emulando una portada del diario francés L’Equipe. Esta acción buscaba normalizar la homosexualidad en el deporte y fomentar la libertad sexual.
Enrique Sarasola (Jinete): Sarasola, exjinete y empresario, declaró su homosexualidad en 2003. “Al hijo de una amiga mía le habían hecho bullying en el colegio por ser amanerado. Nunca me he escondido, tampoco he ido en una pancarta, pero me dio mucho coraje y decidí ser el primer deportista olímpico que declarara que soy homosexual", explicó en una entrevista para RTVE Play. Sarasola ha sido un pionero en la lucha por la igualdad y la aceptación en el deporte, inspirando a otros atletas a seguir su ejemplo y vivir auténticamente.
La lista de ejemplos de personas relevantes en el mundo del deporte que han alzado la voz no es muy larga, pero la esperanza residen en que cada vez se vaya ampliando más porque el contexto social da pie al cambio.