Dos jóvenes transportistas que fueron detenidos por error por los Mossos d'Esquadra tras una persecución han denunciado que los agentes que les arrestaron utilizaron la fuerza y les lesionaron.

Según informa hoy el periódico El Mundo, los hechos ocurrieron el pasado 9 de mayo, cuando los dos jóvenes, que trabajan como transportistas por una empresa del Vallès, se pararon de madrugada en un área de servicio de esta comarca, de donde salieron a toda prisa al ver cómo había varios coches estacionados con las puertas abiertas y que de uno de ellos salía un hombre armado con una pistola.

Por su parte, un portavoz de los Mossos d'Esquadra ha admitido a Efe que los agentes se equivocaron en la detención de estos dos transportistas, al confundirlos con los supuestos delincuentes -que aún buscan-, si bien ha negado que los agentes les agredieran.

Según la versión policial, los dos jóvenes huyeron a toda prisa de la zona, lo que confundió a una patrulla policial y los agentes pensaron que se trataba de los delincuentes.

Por ello, un coche con los logotipos de los Mossos y otro de la policía secreta iniciaron una persecución de la furgoneta, a la que trataron de detener haciéndole señales acústicas y lumínicas.

Sin embargo, la furgoneta siguió circulando a alta velocidad, hasta que un rato después los dos ocupantes decidieron pararse.

En este punto, las versiones son contradictorias, ya que los dos jóvenes sostienen que los agentes se dirigieron a ellos insultándoles, amenazándoles y agrediéndoles.

En cambio, según la versión policial, los dos jóvenes mostraron una resistencia violenta cuando los agentes les dijeron que les iban a detener, por lo que tuvieron que aplicar la "mínima fuerza indispensable" para poderlos arrestar.

Uno de los jóvenes tuvo que ser llevado a un hospital, porque durante el forcejeo se rompió el pie. Una vez en comisaría, los agentes comprobaron que los dos detenidos no tenían nada que ver con el incidente, por lo que dejaron el arresto sin efecto y les dejaron en libertad.