El Gobierno de Jamaica declaró el domingo estado de emergencia en algunas zonas de la capital, después de tiroteos y ataques con bombas incendiarias contra varias comisarías por parte de supuestos colaboradores de un presunto capo de la droga.

La emergencia cubría los distritos de West Kingston y St. Andrew de Kingston, donde hombres armados dispararon contra dos comisarías y prendieron fuego a otra.

Los atacantes eran supuestos colaboradores de Christopher "Dudus" Coke, a quien el Gobierno está buscando por una petición de extradición de Estados Unidos.

Al menos un policía resultó herido. Las calles en la zona de Tivoli Gardens en West Kingston, donde se cree que Coke está escondido, fue cerrada con barricadas, dijeron testigos.

El Departamento de Estado estadounidense emitió una advertencia de viaje a sus ciudadanos ante la posibilidad de violencia en el área metropolitana de Kingston. La isla caribeña es un popular destino turístico para visitantes de Estados Unidos y Europa.

Las tensiones en Jamaica crecieron durante la última semana después de que el primer ministro, Bruce Golding, anunciara que estaba iniciando el juicio para extraditar a Coke, quien es requerido en Estados Unidos por cargos de tráfico de cocaína y armas.

Fiscales estadounidenses describen a Coke como el líder de la pandilla "Shower Posse", que asesinó a tiros a cientos de personas durante las guerras de la cocaína en la década de 1980.

Las relaciones en Jamaica y Estados Unidos se vieron dañadas cuando Kingston ignoró una demanda anterior de extradición por Coke, quien es partidario del gobernante Jamaica Labour Party y ejerce influencia en el inestable distrito interior de la ciudad que representa Golding.