Dos ex reclusos de la base estadounidense de Guantánamo (Cuba), que reclama España por su supuesta pertenencia a una célula de Al Qaeda, seguirán en libertad condicional hasta el próximo 13 de mayo, según decidió hoy un juez británico.

Jamil Al Banna, jordano de 45 años, y Omar Deghayes, libio de 38, ambos con residencia en el Reino Unido, comparecieron hoy ante el Tribunal de Westminster (centro de Londres).

Hasta el 13 de mayo, cuando se celebrará una vista de extradición, los sospechosos tendrán que seguir cumpliendo un toque de queda aunque sin portar, como sucedía hasta ahora, un dispositivo electrónico para controlar su paradero.

Durante la audiencia de hoy, el abogado de los imputados Edward Fitzgerald confirmó que Al Banna y Deghayes se han sometido a un examen médico reflejado en cuatro informes que ya han sido entregados a la Fiscalía, representante de España en el caso.

Mientras la Fiscalía aún debe leer los informes, cuyo contenido no se divulgó hoy, la defensa duda de que los sospechosos estén en condiciones físicas y mentales de afrontar un juicio en España tras su reclusión en Guantánamo.

Ambos imputados volvieron en diciembre pasado al Reino Unido después de estar encarcelados en Guantánamo hasta cinco años.

Nada más llegar a territorio británico, los ex presos fueron arrestados en virtud de una orden europea de arresto por su presunta pertenencia a una célula de la red terrorista Al Qaeda en España.

Tras comparecer el pasado 20 de diciembre ante el Tribunal de Westminster, los dos quedaron en libertad bajo fianza, aunque con la condición de cumplir un toque de queda.

Al Banna, padre de cinco hijos con residencia en el noroeste de Londres, y Deghayes, cuya residencia británica está fijada en Brighton (sur de Inglaterra), pudieron abandonar Guantánamo gracias a la solicitud hecha el pasado agosto por el Gobierno británico.