Mills dice que no la creerían de no haber grabado las conversaciones con McCartney

Heather Mills, la segunda esposa de Paul McCartney, continuó sus ataques públicos contra el músico y afirmó haber grabado todas sus conversaciones con él porque en caso contrario nadie la habría creído.

Los tabloides británicos recogen hoy las últimas declaraciones de Mills a una cadena de televisión estadounidense en las que asegura que McCartney le prometió en un principio admitir su culpa en el fracaso de su matrimonio de cinco años para echarse atrás en el último momento.

Mills culpó a Stella, hija del músico y diseñadora de profesión, del fracaso de su matrimonio: "Semana tras semana, Stella trató de romper nuestro matrimonio. Estaba celosa. He hecho cosas muy, muy malas".

La ex modelo explicó que otro de los motivos de la ruptura fue la negativa de McCartney a donar más cantidad de dinero a causas benéficas teniendo en cuenta su fortuna, calculada en 825 millones de libras (1.188 millones de euros).

"¿Cómo una persona que tiene tanto dinero podía negarse a dar más dinero a ese tipo de causas? Ése era un frecuente tema de polémica entre nosotros", afirmó.

Mills afirmó también que, cuando ambos se separaron, ella le dijo a Paul que iban a "crucificarla" a "lapidarla" y le pidió entonces que dijera la verdad y se atribuyera la culpa del fracaso del matrimonio.

También aseguró que se había casado con un hombre, no con un Beatle, con alguien que la había cortejado y perseguido durante tres meses y explicó que cuando se conocieron, McCartney era "un hombre roto".