El grupo parlamentario de ERC-IU-ICV registró ayer una petición de comparecencia, en este caso de la ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, para que dé explicaciones en el Congreso por el incumplimiento del Estatut en el plazo de la financiación. Este grupo ya formalizó ayer otra petición similar, en este caso dirigida al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

Ambas peticiones, y también la que presentó el lunes el PP, se debatirán en la Diputación Permanente del próximo día 20, tal como anunció ayer el presidente de la cámara, José Bono.

El PSOE busca la manera de evitar las comparecencias pero a día de hoy no las tiene todas consigo. El presidente del PNV en Guipúzcoa, Joseba Egibar, declaró ayer que su partido hará lo que determine CiU. Y la federación nacionalista se inclina de entrada por apoyarla porque proviene de un grupo catalán, aunque no le parezca una buena idea.

Por su parte, el portavoz de ICV en el Congreso, Joan Herrera, cargó ayer contra el PSC por no apoyar la petición de comparecencia de Zapatero. En declaraciones a RAC-1, Herrera dijo no entender esa postura ya que 'si de alguna cosa deben estar disgustados' los diputados del PSC es de la 'actitud del Gobierno Zapatero'. Para el PSC, la comparecencia es un 'error' que 'rompe la bilateralidad' de la negociación.

A pesar de la tensión entre las dos formaciones, en Catalunya se sigue apostando por la estrategia del frente común. El presidente de ERC, Joan Puigcercós, apeló ayer de nuevo a esa unidad porque 'Madrid buscará fisuras'. En declaraciones a Catalunya Ràdio, el líder republicano recomendó a los partidos catalanes no 'perder los nervios y aguantar'