El PP presentará hoy a la Fiscalía General del Estado (FGE), tras saber que el presidente valenciano, Francisco Camps, pudiera estar implicado en un caso de corrupción, una denuncia ante 'un delito de filtración de un sumario secreto' cometido presuntamente 'por personal al servicio' de Anticorrupción.

El responsable de Comunicación del PP, Esteban González Pons, ha pedido conocer cuántos aforados del partido están siendo investigados por el juez Baltasar Garzón, por lo que ha exigido que se levante el secreto de sumario, y ha expresado su temor de que si esto no ocurriera, haya más filtraciones la semana que viene, la última de campaña electoral en Galicia y en el País Vasco.

Pons ha añadido que a la investigación que sigue Garzón puede acceder el Gobierno por medio del Ministerio de Interior o del Ministerio de Justicia, mientras que el PP no puede hacerlo, y que por ello, se trata de una trama 'contra el Partido Popular' dirigida con el único fin de 'hacer daño político' a los conservadores y 'eliminar cualquier oposición' al Ejecutivo.

Aunque el Partido Popular había convocado una conferencia de prensa para denunciar que la Junta de Andalucía ha suscrito contratos con la entidad de un empresario condenado por 'malversación de caudales públicos', Pons se ha referido a la información que apunta a Camps como un implicado más en la trama de corrupción supuestamente ligada al PP que investiga Garzón.

Ha dicho que hoy, 'a los ojos de todo el mundo, a la cara de los españoles', ha tenido lugar 'un delito de violación de un secreto sumarial', pues si antes pudieran ser publicaciones parciales de los documentos que acompañaban a la demanda, 'lo de hoy es indudablemente una violación del secreto de sumario'.

Un 'delito' que además afecta a 'una persona querida y respetada, y muy importante en el PP'.

Y que tiene, ha continuado Pons, 'tres agravantes': que 'presumiblemente son fuentes de la propia Fiscalía las que han cometido este delito de corrupción judicial'; segundo, que 'se produce en el marco de una investigación sistemática dirigida por el PSOE contra el PP'; y tercero, que mientras el Gobierno puede conocer el sumario, los populares se sienten 'indefensos'.

'El Gobierno o sus fuentes van filtrando de manera calculada partes de ese sumario con la intención de causar daño político al PP. Tenemos la sensación de que los socialistas han decidido la eliminación política de toda oposición a José Luis Rodríguez Zapatero', ha sentenciado.

Para el vicesecretario de Comunicación de los conservadores, la 'indignación' en el partido es palmaria, así como su 'perplejidad', y por ello, ha apelado a la 'calma' y a la 'paciencia', también en militantes y votantes, para transmitir la certeza de que 'se van aclarar hasta los últimos detalles de este hecho bochornoso' y 'humillante'.

Ha añadido que 'alguien quiere' que los conservadores 'sientan miedo' de los fiscales, lo que sin embargo no sucederá nunca.

Fruto de esta 'indefensión', el PP remitirá a la Fiscalía General del Estado la denuncia por lo que considera 'un delito de violación del secreto de sumario' y nuevamente pedirá la comparecencia en el Congreso del titular del Ministerio público, Cándido Conde-Pumpido, para que explique qué ha hecho para 'evitar las filtraciones'.