El euríbor, el principal indicador para el cálculo de hipotecas, cayó hoy en su negociación diaria al 1,619% con lo que, tras siete sesiones consecutivas de descensos, la media provisional de mayo se sitúa en el 1,643%, por debajo del mínimo histórico con el que cerró mayo.

En las catorce sesiones negociadas en junio el indicador se ha movido a la baja pero con alguna subida puntual, lo que indica, según los analistas consultados por EFE, que está a punto de concluir la senda decididamente bajista que comenzó hace ocho meses.

Entonces, coincidiendo con la quiebra de Lehman Brothers, el Banco Central Europeo (BCE) decidió modificar su mandato de lucha contra la inflación y orientar su política monetaria a la falta de liquidez del mercado.

Comenzó así una serie de bajadas de tipos de interés en la zona del euro que el BCE detuvo en su reunión de junio, cuando dejó inalterada la tasa en el 1 por ciento.

El euríbor, que suele subir o bajar en función de la subidas o bajadas de tipos aprobadas por el banco europeo, comenzó entonces una racha bajistas en la que llegó a encadenar 91 sesiones consecutivas de descensos.

De este modo, el indicador pasó del 5,248 por ciento de octubre al 1,644 por ciento de mayo de este año, el mínimo histórico de sus diez años de historia.

Según los analistas, a partir de ahora cabe esperar una evolución moderada y sin sobresaltos del indicador, que debería terminar el mes por debajo de la tasa del mes anterior.

Ello proporcionará a las familias hipotecadas con préstamos suscritos hace un año que se revisen en julio, a las que se aplica la tasa del mes anterior, descuentos de entre 300 y 600 euros mensuales, dependiendo si se trata de un crédito de 150.000 o 300.000 euros.

Hace un año, en junio de 2008, el euríbor se elevaba al 5,361 por ciento, más de tres puntos y medio porcentuales con la previsible media con la que cerrará este mes.

Un mes después, en julio, marcó su máximo histórico en el 5,393 por ciento.