Todos somos conscientes de que el alcohol, en caso de consumirlo, ha de hacerse con moderación para cuidar nuestra salud. No conviene dejarse llevar por los excesos o las consecuencias pueden ser muy graves tanto para nosotros mismos como para los nosotros. Desde luego, en el supuesto de ir a conducir, lo mejor es no probar ni una gota para evitar correr riesgos y sufrir un accidente.
Por ese motivo, en el supuesto de consumir alguna bebida alcohólica es necesario ser consciente de qué graduación posee y cuáles son sus efectos. Esto nos permitirá ser cautos a la hora de decidir qué cantidad tomar, sobre todo, si hablamos de vino o cerveza, dos de las bebidas más consumidas en nuestro país. ¿Cuál de ellas tiene mayores efectos sobre nuestro organismo? ¿Cuál emborracha más?
Cantidad de alcohol en las bebidas
Todas las bebidas alcohólicas contienen mayor o menor cantidad de alcohol en su composición, es decir, su graduación es más o menos alta. La graduación alcohólica es la que determina la proporción de etanol en la bebida, lo que influye en los efectos que provocan en nosotros cuando las bebemos. Así las cosas, de manera general, es necesario distinguir entre tres tipos si tenemos la cantidad de alcohol en cuenta.
Las bebidas con más graduación son aquellas como los licores que alcanzan hasta un 45% de alcohol. Le siguen los vinos, que suelen rondar entre 12% y 16% de alcohol. Y, por último, la cerveza, que tiene en torno a un 5%.
Por supuesto, esto es de manera general, porque encontrarás cervezas muy fuertes, como la que produjo la cervecería escocesa Brewmeister con un 67,5%, y vinos más suaves, frescos y cítricos, con un 7,5% o un 9%. Pero para responder a la pregunta que hoy nos hacemos, vamos a quedarnos con las cifras generales de la mayoría de los productos del mercado y no con los casos específicos. Como resultado, de manera general, el vino tiene el doble de alcohol que la cerveza.
¿Qué emborracha más: el vino a la cerveza?
Teniendo esto en cuenta, y con la misma cantidad de líquido, el vino emborracha más que la cerveza. Incluso si comparamos una botella de vino de 75 centilitros y tres botellines o tercios de cervezas, sucederá lo mismo. Ten en cuenta que una copa de vino contiene el alcohol de una pinta de cerveza, es decir, en torno a medio litro de bebida. Además, por su composición, la cerveza sacia más, de manera que será más fácil que te excedas consumiendo vino y acabes en un estado de embriaguez mucho antes que bebiendo cerveza.
Por ese motivo, es necesario tener mucho cuidado con esas copitas de vino cuando vas a conducir, realizas algún tipo de actividad delicada o manejas maquinaria pesada. Antes de lo que crees, se te habrá subido a la cabeza.
Alcohol en sangre
Otro factor a considerar es la rapidez con que el alcohol que ingerimos pasa a nuestro torrente sanguíneo. Entre el vino y la cerveza vuelve a haber diferencias en este punto. La investigación que llevó a cabo Mack Mitchell, de la Universidad de Texas Southwestern Medical Center, publicada en 2014 con el título Absorption and Peak Blood Alcohol Concentration After Drinking Beer, Wine, or Spirits, llegó a interesantes conclusiones sobre la velocidad con que afectaban las bebidas alcohólicas tras su consumo.
De tal modo, mientras los licores son los que más rápido conducen el alcohol al torrente sanguíneo, en el caso del vino, la presencia mayor la alcanza a los 54 minutos de consumirlo, y la cerveza, a los 62 minutos. No obstante, una persona sana comenzará a notar sus efectos entre 15 minutos y 45 minutos después de haber bebido. Además, el alcohol puede detectarse en pruebas sanguíneas hasta seis horas, ¡y en el cabello hasta 90 días!
Otras variedades
Por último, y sabido todo lo anterior, también es necesario apuntar que, si lo que te gusta es la cerveza tostada, esta tiene tanto alcohol como un vino de baja graduación de los que tan de moda están ahora. Así que en este caso, tendrás que controlar la cantidad, aunque el vino siga subiéndose más rápido que la cerveza.
En cualquier caso, recuerda que, si vas a conducir, no quieres saber nada del alcohol o necesitas tener la mente bien despejada, también tienes la opción de degustar la variedad de cervezas 0,0% que hay en el mercado, desde rubias a tostadas, así como los vinos sin alcohol, también 0,0%, que cada vez hay más bodegas comercializando. Nunca como ahora hubo tantas variedades con y sin alcohol para todos los gustos y para todas las ocasiones. Vale la pena aprovechar todas las opciones y cuidar nuestra salud y la de los nuestros.
