Público
Público

"La corrupción es un problema moral: no te compran si no te vendes"

Rubén Blades. Músico. El gurú de la salsa reivindica el compromiso social
de la canción en su gira de regreso a los escenarios españoles

CARLOS FUENTES

Todos vuelven y Rubén Blades también. El cantante panameño retorna a la música tras cinco años como ministro de Turismo de su país. Rebosante de energía y con 15 proyectos simultáneos en camino. Está regrabando sus discos clásicos, prepara un álbum de tangos, otro en portugués y sendas colaboraciones con Cheo Feliciano y Paco de Lucía. 'Voy a grabar un disco de boleros con mi ídolo. Aún tenemos que discutir cómo, cuándo y cuánto, pero hace tiempo que deseamos trabajar juntos y es ahora o nunca. Es un honor porque Paco tiene una calidad especial como músico y como persona, lo quiero mucho', señala el autor de Buscando América, después de reivindicar el compromiso de 'defender el argumento en la calle, asumir riesgos desde la trinchera pública' y combatir la 'calamidad' de la corrupción. 'Se requiere una conciencia nacional, pública y privada, sin egoísmo, sin falta de solidaridad y sin una obsesiva persecución de lo material a expensas de lo espiritual', afirma el compositor, actor y licenciado en leyes, en conversación desde Panamá antes de actuar en Madrid (mañana), Huesca (14 de julio), Vitoria (15) y Barcelona (16).

¿Quién es Rubén Blades después de haber sido político?

'En cinco años de ministro no hice discos, ni películas, y eso me hizo menos egoísta'

Tengo varias facetas que forman parte de una misma persona. Nunca he tenido que ubicarme en un plano y abandonar otro porque todo lo que hago tiene integridad, forma parte de un núcleo. Lo que pienso, digo y hago son una sola cosa, todo está conectado. No he dejado de ser político por ahora volver a la música, como tampoco dejé de ser músico por incursionar en la política, ni dejo de ser actor por ser músico o político. Más importante aún, tampoco he dejado de ser persona o de verme afectado por lo que ocurre a mi alrededor por ejercer distintas aptitudes.

¿Y qué ha aportado la experiencia política al músico?

Mi trabajo público, servir al país, a mi pueblo, fue un ejercicio de solidaridad social, algo real. En cinco años no hice discos, ni películas, y eso me hizo un ser menos egoísta, más paciente, más educado en la realidad política. No es sólo cantar, denunciar, proponer o protestar. También hay que salir a defender el argumento a la calle, asumir riesgos desde la trinchera pública. Enfrentar la contradicción que se plantea cuando nuestra actividad artística nos crea una situación económica holgada, distinta a la de lo que describimos con la música. Salir de la comodidad que plantea la distancia del hecho criticado y encararlo en el terreno del riesgo personal da validez y consistencia al argumento musical, que empezó en 1969 con Juan González. La experiencia política me hace mejor ser humano y me da derecho a sentir orgullo por tener coherencia, saber que lo que escribo no es simplemente una pose o un cuento.

'La experiencia política ha hecho que lo que escribo no sea sólo una pose'

¿Comparte la indignación del pueblo, en especial de la gente joven, cuando critica lo que entiende como un pobre trabajo de los políticos?

Claro. Pero le indico al pueblo, joven o adulto, que la culpa de que en política y en el sector privado haya gente corrupta, sinvergüenza, mediocre, sin imaginación y sin deseo verdadero de servir al país la tenemos todos. La corrupción no es un problema político: es un problema moral, espiritual, es una calamidad nacional. Es una soberana estupidez afirmar que el que va al Gobierno va a robar o que el Gobierno corrompe a la gente. Lo que ocurre en muchos casos es que pocos ciudadanos participan en el proceso político de forma responsable. Votan por gente sin tener realmente intención de fiscalizar el desempeño de quien envían al trabajo administrativo y no consideran ellos mismos reemplazar a los que critican participando en la administración pública. Lo escuché una y otra vez: 'No entro en el Gobierno porque me ensucio'. Es absurdo. Si no cambiamos a los que criticamos, ¿cómo carajo vamos a salir de ellos? Cuando trabajé cinco años, lo hice con afecto y espíritu, y no robé, ni actué deshonestamente. Dejé de ganar dinero como artista y di mi tiempo completo, cinco años, a hacer bien las cosas y a educar a través del ejemplo. Pocos hacen eso, por desgracia: dejar sus ocupaciones exitosas, que dan bienestar económico, y trabajar en el Gobierno, hacerse responsables ante el pueblo. A los jóvenes, les digo: voten con sensatez y participen del proceso. Y acuérdense de esto: no te compran si no te vendes.

¿Veremos algún día una Latinoamérica unida?

«Calle 13 y Tego Calderón son importantes y necesarios»

Décadas atrás le preguntaron a un presidente de Panamá qué necesitaba su país para ser como Suiza y él respondió: a los suizos. Esa unión latinoamericana no se ha dado por la infección que existe en los espíritus de nuestra gente, por la ausencia de credibilidad en las instituciones públicas y por la falta de liderazgo dirigido a un objetivo posible. No es nuevo. Lo que pasó con Simón Bolívar sigue vigente. Los beneficios de la integración latinoamericana serían enormes, de la capacidad de negociación internacional en materias múltiples hasta complementar nuestras economías compartiendo fortalezas para disminuir las carencias con un mercado común. Pero los nacionalismos mal entendidos, los egos, la ignorancia de gran parte de nuestras poblaciones, la falta de confianza en los argumentos políticos y la ausencia de un sentido nacional de propósito todo eso nos derrota.

Política aparte. Pronto cumplirá 63 años. ¿En qué forma se encuentra? ¿Se escribe mejor con tantos años acumulados de experiencia?

Se escribe mejor con el tiempo, se entiende mejor lo que se escribe y por qué. Se edita uno con más claridad, va al punto, entiende que a nuestra edad el mejor momento para hacer las cosas es ahora. He tenido la suerte de aprender y evolucionar. No se escribe mejor simplemente por cumplir años. Hay que entender para proponer con sentido. Aunque la ausencia de comprensión jamás ha disuadido al ignorante de compartir su ignorancia con nosotros.

¿Y es consciente de la importancia que tuvo y tiene Buscando América para todos los que hablamos español?

En realidad no debo comentar, el tiempo lo dirá. Mis temas tienen aún vida y por eso sigo trabajando, aunque no suenen en la radio frecuentemente. Es interesante que en Latinoamérica se han producido, desde Siembra, cambios políticos que se veían imposibles en 1978, por partidos y tendencias políticas que no tenían la menor oportunidad de llegar al poder en elecciones populares.

Dijo una vez que los chicos jóvenes de la música urbana, de Calle 13 a Tego Calderón, son los nuevos cronistas del barrio latino

Cada generación inventa su lenguaje y su forma de expresión. Calle 13 o Tego Calderón tienen toda la validez que les da su existencia como representantes urbanos, describiendo la realidad de un momento específico. No sé si lo que hacen durará en el tiempo. Nadie lo sabe cuando se empieza. Pero lo que están diciendo refleja una realidad actual, aunque no nos guste o no la admitamos. Son lo que son: importantes y necesarios.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?