El Chelsea se relaja, Torres sufre

Ancelotti avisó antes del partido: "Torres ha jugado bien y ha hecho todo lo que le he pedido, le necesitamos ante el Manchester City". Dicho y hecho. El entrenador del Chelsea, con la cabeza puesta en el partido de Liga del domingo, sentó ayer en el banquillo al delantero español y a varios titulares más. El Niño pisó el césped en el minuto 68, pero sigue sin marcar.

La eliminatoria europea ante el Copenhague quedó finiquitada en Dinamarca, donde los ingleses ganaron 0-2, así que Ancelotti planteó la cita como un mero expediente burocrático y, con la anuencia del Copenhague, vivió una noche plácida. Jugadores y aficionados azules únicamente dieron un respingo cuando N'Doye ejecutó un libre directo y, tras superar a la barrera, estrelló el balón en la escuadra derecha de Cech. Sucedió en el minuto 25 y fue la única acción de verdadero peligro de un conjunto que viajó con el adiós a la Champions en la maleta.

Cuando fue evidente que todo estaba bajo control, el entrenador italiano llamó a Torres y le regaló veinte minutos. Le ofreció la oportunidad de engrasar por fin el gatillo, de anotar su primer gol de color azul. El Niño, como todo delantero, lo necesita ya. Por eso inventó raudo dos galopadas muy suyas por la banda izquierda que él mismo cerró con sendos remates. Luego tiró un puñado de desmarques sin acompañamiento por parte de sus compañeros, dibujó un preciosista e inconcluso regate cola de vaca y buscó en todo momento la red. Aún no la encuentra.