El Real Madrid ha perfeccionado esta temporada la maquinaria de 2011. Sin embargo, los jugadores que han llevado a la consecución de la Liga son los mismos que el año pasado sólo pudieron hacerse con la Copa y mordían el polvo por tercera temporada consecutiva en el campeonato doméstico.

La mejora de los blancos tiene mucho que ver con el progreso de Cristiano Ronaldo. El portugués, que el año pasado era más egoísta sobre el campo, ha brillado esta temporada como nunca al lado de su compatriota Mourinho.

Con unos números que asustan, ha derribado casi cada fin de semana a cada portero que se le ponía por delante. Sin duda, su duelo particular con Messi le ha hecho todavía mejor esta temporada. Además, ha jugado mucho más para el equipo. Por ello, en gran parte gracias a él, el Real Madrid ha vuelto a ser campeón de Liga.

Junto a él en ataque Benzema ha vuelto a ser el delantero que era en Francia. Y se ha hecho esperar hasta su tercera campaña como blanco para darlo todo. Como uno de los máximos goleadores del equipo, ha demostrado que no es el gato de Mourinho, sino el perro.

Un perro de caza que también lo ha sido Higuaín, aunque ha acabado como suplente. El Pipita, sin embargo, ha vuelto a ser clave en varios partidos de la Liga y ha respondido con goles, aunque no ha sido suficiente para el técnico portugués.

En la mediapunta, Özil ha vuelto a ser definitivo, decisivo e indiscutible. El alemán ha dado todo un repertorio de pases y regates este año que ha hecho posible el vertical juego del Real Madrid y ha sacado al equipo del atolladero cuando más lo necesitaba.

En la mediapunta, Özil ha vuelto a ser definitivo, decisivo e indiscutible

El faro de este Real Madrid campeón lo ha sido sin ninguna duda Xabi Alonso. Fijo para Mourinho en el centro del campo, lo ha jugado todo, siempre aportando al equipo la lucidez necesaria o que le faltaba. Es el cerebro blanco, donde empieza cada jugada.

A su lado, el alemán Khedira ha cumplido esta temporada. Sin llegar a estar soberbio, ha sido titular, aunque es verdad que Mourinho no tenía más recambio con Lass defenestrado.

Con su recolocación de central, Sergio Ramos ha vuelto a ser el defensa por el que el Real Madrid pagó una millonada al Sevilla. Ha sido el seguro de los blancos en la retaguardia, y junto a Pepe han formado una pareja de garantías.

El portugués ha vuelto a estar este año en el ojo del huracán por sus actuaciones en el campo. Demasiado expeditivo, ha jugado casi siempre al límite de las reglas y este año no se ha vuelto a librar de varias polémicas. No obstante, en lo estrictamente defensivo ha cumplido el cometido de Mourinho.

Sin apenas competencia en la banda derecha, Arbeloa ha vuelto a ser el titular esta temporada, aunque ha dado muestras de cierta debilidad a lo largo de la temporada, mientras que Marcelo se ha confirmado como un gran lateral en la otra banda. El brasileño ha desatascado al equipo en ataque en muchos partidos aunque defensivamente no ha estado a tan alto nivel.

En la portería, Casillas continúa siendo indiscutible e insustituible. El madrileño ha vuelto a ser el 'santo' en muchos partidos, cuando su equipo lo ha necesitado. Aunque algunos errores en los últimos partidos lo han señalado, el capitán tiene todavía mucho que recorrer.

Las decepciones, sin embargo, también han existido, pese al gran nivel al que han brillado la mayoría de los jugadores. A Kaká ya prácticamente no se le espera y es bastante probable que haya dilapidado su última oportunidad para subirse al tren del Real Madrid. Además, los fichajes de este año han estado desaparecidos. Coentrao ha sido el centro de las críticas los pocos minutos que ha jugado por su trabajo ofensivo y defensivo, que ha dejado que desear después de pagar 30 millones por él. A Sahin y Altintop habría que dedicarle un 'sin comentarios', ya que su presencia ha sido testimonial.