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El hombre que venció a Alí

El boxeador Joe Frazier murió el lunes en Filadelfia a los 67 años

ALBERTO CABELLO

Joe Frazier (1944-2011) vivió en la época en la que el linimento perfumaba maravillosas historias. Odios enconados en un ambiente sacudido por un profundo seísmo social en el Estados Unidos del conflicto racial, el antibelicismo y las canciones de Bob Dylan. En ese ambiente apareció Smokin Joe para ser uno de los grandes héroes de la Edad de Oro del boxeo junto a Muhammad Alí o George Foreman.

Frazier falleció el lunes en un hospicio de Filadelfia a causa de un cáncer de hígado. Arruinado, vivía en un pequeño apartamento encima del gimnasio en el que pasaba el tiempo dando consejos a los futuros reyes del cuadrilátero. De sus 37 combates ganó 32, 27 por ko. 'El boxeo es el único deporte en el que te pueden machacar el cerebro, acabar arruinado y en el libro de la funeraria', dijo en alguna ocasión.

El boxeador Joe Frazier murió el lunes en Filadelfia a los 67 años

Su retrato una vez colgado los guantes perpetuó una imagen con los párpados hinchados y los ojos a medio abrir después de tantos años de golpes y más golpes. Pero no sólo los recibió, también los dio y bien fuertes. Fue el primer boxeador que consiguió derrotar a Alí. Le habían tumbado en la lona, pero nadie antes que Frazier le venció en un combate. Fue el 8 de marzo de 1971 ante 20.455 espectadores en el Madison Square Garden de Nueva York. Por decisión unánime de los árbitros y después de mandar a Alí al suelo con un golpe en el decimoquinto asalto, retuvo el título de campeón de los pesos pesados. Aquel encuentro se bautizó como el combate del siglo. La bolsa de dinero que logró Frazier por esa pelea se estima que alcanzó los dos millones y medio de dólares.

Todavía quedarían otros dos encuentros más de una de las grandes rivalidades de la historia del deporte. Se odiaban, representaban dos estilos opuestos: Alí era la técnica, 'la mariposa que picaba como una avispa'; Frazier desnudaba al boxeo de tanta coreografía, era más tosco en su baile pero un martillo en sus golpes. Le compararon con una locomotora subiendo una cuesta.

El 8 de marzo de 1971 derrotó a Muhammad en el combate del siglo

En enero de 1974 volvieron a encontrarse en Nueva York y esta vez la victoria fue para Alí. Filipinas acogió un año más tarde el Thrilla in Manila. Pocas veces se ha visto a dos boxeadores castigarse más sobre un ring. El entrenador de Frazier tiró la toalla en el asalto 14 con su púgil casi ciego de tanto golpe recibido. Cuenta la leyenda que en ese mismo instante alguien oyó decir a Alí que le quitaran los guantes para acabar con ese martirio interminable.

Antes de haberle sido descubierto el cáncer, Frazier estaba haciendo vida normal, con apariciones regulares en público para firmar autógrafos, incluida la última que hizo el pasado septiembre, en Las Vegas.

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