Rafa Nadal y Roger Federer van camino de encontrarse en la final del Masters 1000 de Montecarlo tras vencer con facilidad el jueves sus respectivos partidos de tercera ronda.

Nadal hizo frente a unas temperaturas frías poco frecuentes en la soleada Costa Azul y selló con facilidad su pase a los cuartos de final después de superar al francés Richard Gasquet por 6-2 y 6-4.

Mientras los espectadores, acurrucados para entrar en calor, dudaban de si animar al campeón en seis ocasiones de Mónaco o al favorito francés, el tenista español rompió el servicio de su rival en el primer juego, en una nueva demostración de potencia que abrumó a su rival.

El mallorquín, que aspira a ser el primer tenista que gana el mismo torneo siete veces consecutivas a la vez que se prepara para el torneo de Roland Garros del mes próximo, a punto estuvo de perder el siguiente juego, pero mantuvo su servicio gracias a un revés a la línea, y apenas miró hacia atrás.

Gasquet consiguió romperle el servicio con 4-4 en el segundo set, mostrando algunas hendiduras en la armadura de Nadal y ofreciendo a los aspirantes al triunfo una pequeña esperanza de que se le puede batir sobre tierra batida.

Ahora el próximo obstáculo de Nadal para pasar a las semifinales será el croata Ivan Ljubicic, que se impuso al checo Tomas Berdych, número cinco del mundo, con un marcador de 6-4 y 6-2.

Por su parte, el segundo cabeza de serie, Federer, se impuso al croata Marin Cilic por 6-4 y 6-3 después de que el sol se abriera paso entre las nubes en Montecarlo.

El suizo apenas puso la primera marcha, pero lanzó algunos golpes ganadores y su resultado nunca estuvo en duda.

En cuanto al cuarto cabeza de serie, el también español David Ferrer, también avanzó hacia cuartos con una victoria fácil por 6-1 y 6-3 sobre el canadiense Milos Raonic, situado en el puesto 34 de la clasificación mundial. Ahora se enfrentará el serbio Viktor Troicki, undécimo del mundo, tras la retirada del español Tommy Robredo por lesión cuando éste lideraba el marcador por 6-3 y 1-2. Raonic, quien subió vertiginosamente a principios de año del puesto 156 del ránking al número 34, no supo cómo responder a la astucia de Ferrer.

Por otro lado, el número cuatro del mundo, Andy Murray, se enfrentará al francés Gilles Simon con la esperanza se aprovechar la victoria que consiguió al comienzo del torneo sobre Radek Stepanek, que fue su primer triunfo en dos meses y medio.