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Quique no pone límites al Atlético

HUGO JIMÉNEZ

Athletic y Atlético evalúan esta noche en San Mamés las buenas expectativas que apuntaron en el estreno liguero. Tantas, que los madrileños ya son señalados como la ansiada tercera vía que permitiría discutir la dictadura de Barça y Madrid. La mayoría de los jugadores rojiblancos se han mostrado reticentes a colgarse el cartel de alternativa a los dos poderosos, pero Quique Flores parece dispuesto a aceptar el reto.

'Nuestro objetivo es entrar entre los cuatro primeros y, dentro de eso, cuanto más arriba estemos más felices seremos', manifestó ayer Quique. 'Nosotros tenemos nuestras limitaciones. Tenemos que jugar superconcentrados y casi a un nivel de excelencia para hacer los puntos de Madrid y Barcelona', añadió el técnico que, sin embargo, no se cierra ninguna puerta: 'Barça y Madrid aparentemente juegan a otra cosa, porque así lo marcan los presupuestos, pero el fútbol tiene de maravilloso que de repente surgen cosas y nosotros queremos estar dentro de eso'.

El equipo viajó ayer a Bilbao sin Fran Mérida ni Ujfalusi, lesionados. La baja del checo en el lateral derecho será suplida por Valera. Además, Tiago y Filipe Luis, que sí entraron, aún no tienen el ritmo adecuado para un partido completo. Antonio López, Domínguez y Godín completarán la zaga rojiblanca. Quique trabajó la táctica e hizo hincapié en los ejercicios con balón para salir de la presión. Además, el técnico puso el primer vídeo de la temporada y trabajó la estrategia para el choque de San Mamés.

El Atlético, que volverá a depender del acierto goleador de sus estrellas, está demostrando una solvencia defensiva inusual durante el comienzo de curso. Los rojiblancos no encajaron ningún gol en los dos partidos oficiales que disputaron. Agüero y Forlán se miden a un equipo fetiche para ambos. El argentino marcó su primer gol en la Liga hace cuatro temporadas ante el Athletic, mientras que para el uruguayo es su víctima preferida: le ha hecho 11 goles.

El Athletic debutará ante su afición y Joaquín Caparrós, entrenador local, repetirá el once con el que derrotó al Hércules en la jornada inaugural (0-1). Los vascos tratarán de impedir que el partido se abra para no darles espacios a un rival cuya rapidez te mata al contraataque. 'Es el primer partido en casa y la gente estará con ganas de ver a su equipo. Esperamos darles la primera alegría de la temporada ', señaló ayer Gabilondo.

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