Las vuvuzelas invaden la Red

La vuvuzela es una especie de cuerno largo de plástico, muy popular y muy molesto. Al menos, eso opina la mayoría de aficionados que han acudido a Suráfrica a animar a su equipo en el mundial. Quienes prefieren verlo desde sus casas también lo han notado: es el monótono, sostenido e irritante sonido de fondo que atrona en todos los partidos.

Inventada en 1965 (no está del todo claro por quién) toma su diseño de las bocinas que hace años se colocaban en los manillares de las bicicletas. Su nombre proviene de un término coloquial que  significa "ducha". No fue hasta los años 90 cuando se empezaron a popularizar en Suráfrica.

Pero su auténtico boom, sin duda, ha llegado con la celebración del Mundial: en las dos últimas semanas se han vendido más de 30.000 unidades en el país africano, cerca de un millón y medio sólo en Europa. La tienda online estadounidense Amazon ha aumentado las ventas de este instrumento en un 1000%.

Las vuvuzelas también han captado la atención de Internet, especialmente a raíz de las muchas críticas que han suscitado. Un rápido vistazo es suficiente para encontrar infinidad de parodias, fotomontajes y canciones con el protagonismo del molesto instrumento.

Ya existe un grupo de facebook en español ("Yo también odio el sonido de la vuvuzela del mundial"), aplicaciones para el iPhone, e incluso  una web en la que el único propósito es hacerlas sonar el mayor tiempo posible. La Red acostumbra a popularizar desde el humor los más diversos temas, a veces hasta convertirlos en un nuevo meme.

También hay sitio para el sentido crítico. Cerca del 56% de los comentarios publicados en foros, blogs y redes sociales muestran su rechazo por el sonido de "la ducha" surafricana, según la página web  Mashable.com. "Molesto, irritante y odioso" son los términos más usados para definirlas, según informa mashable.com, sitio dedicado al estudio de tecnología y medios en Internet.

Incluso ya hay una nueva parodia de El Hundimiento sobre las vuvuzelas. Sólo queda esperar la aparición del niño loco alemán.