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La UE aprueba una versión descafeinada de las normas bancarias de Basilea III que favorece a los bancos

El acuerdo sellado por los ministros de Finanzas de los Veintisiete, que rebaja las exigencias de capital para las entidades financieras con respecto a los estándares internacionales, preocupa al Banco Central Europeo.

El comisario de Asuntos Económicos de la UE, Paolo Gentiloni, conversa con el ministro de Finanzas irlandés y presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, de camino a la foto de familia de la reunión de los ministros de la UE con los de os países de la EFTA
El comisario de Asuntos Económicos de la UE, Paolo Gentiloni, conversa con el ministro de Finanzas irlandés y presidente del Eurogrupo, Paschal Donohoe, de camino a la foto de familia de la reunión de los ministros de la UE con los de os países de la EFTA, en Bruselas. OLIVIER HOSLET / EFE/EPA

Los Gobiernos de la Unión Europea llegaron este martes a un acuerdo para implementar en el bloque las normas bancarias de Basilea III, destinadas a reforzar los colchones de capital y la supervisión de las entidades, que rebaja las exigencias con respecto a los estándares internacionales y preocupa al Banco Central Europeo. Los Estados de la UE negociarán ahora un acuerdo final con el Parlamento Europeo.

El acuerdo sellado por los ministros de Economía y Finanzas de los Veintisiete confirma y amplía las excepciones incluidas en la propuesta presentada por la Comisión Europea el año pasado, retrasando hasta 2025 el momento para empezar a aplicar estas reglas (que el comité de Basilea había fijado en 2023) y dando hasta 2030 para implementarlas totalmente.

"Es importante tener en cuenta las especificidades del sector bancario europeo", dice la presidencia checa de la UE

"Es importante tener en cuenta las especificidades del sector bancario europeo y la situación específica en nuestros Estados miembros. Confío en que los textos actualizados que hemos acordado hoy logren esos objetivos", celebró el ministro de Finanzas checo, Zbyněk Stanjura, cuyo país preside este semestre la UE.

Los ministros de Finanzas de Alemania y Francia dijeron que el paquete logró alcanzar el "equilibrio correcto". España, representada por el Secretario del Tesoro, Carlos Cuerpo, apoyó el texto de compromiso por considerar que "refleja el adecuado equilibrio entre una implementación fiel de las normas y la consideración de elementos indiosincráticos del mercado europeo", pero insistió en que estas desviaciones deben seguir siendo "temporales", un punto enfatizado también por otros socios.

La mayor parte del acuerdo Basilea III, un conjunto de reglas de capital más estrictas para los bancos que se estableció después de la crisis financiera mundial hace más de una década, ya se ha implementado.  Pero los bancos europeos han presionado notablemente para suavizar temporalmente algunas de las reglas restantes, argumentando que ya tienen suficiente capital y que los requisitos más altos afectarían a los préstamos a la economía.

Las reglas revisadas ofrecerían un alivio hasta 2032 para neutralizar en gran medida los aumentos de capital para algunos bancos que tienen hipotecas de bajo riesgo. Como punto central, estas normas limitan el uso que los bancos pueden hacer de los modelos internos para calcular el riesgo de sus carteras, pero haber aplicado directamente estas disposiciones en la UE hubiera llevado a un aumento importante de los requisitos de capital para la banca, por lo que Bruselas propuso ajustes para limitar este incremento a un máximo del 8,4% en 2030.

El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, advirtió durante el debate de los ministros comunitarios de que el supervisor sigue "preocupado" por las "numerosas desviaciones" con respecto a lo acordado internacionalmente, en particular en cuanto a la valoración del riesgo crediticio, y de que la UE se expone a que el Comité de Basilea considere incluso que no cumple lo pactado.

"Cada desviación puede parecer solo una grieta aislada en el dique que protege al sector bancario europeo, pero juntas esas numerosas griegas erosionan la solidez y estabilidad del dique", dijo De Guindos, insistiendo en la importancia de una banca "bien capitalizada" en un escenario macroeconómico que "empeora".

Subrayó que el acuerdo entre países rebaja la ambición de la propuesta de la Comisión en medidas "importantes" para reforzar la supervisión, en particular las reglas para evaluar a los directivos bancarios y el marco para vigilar a las subsidiarias de grupos de terceros países que operan en la UE, donde defendió una mayor armonización para asegurar la "igualdad de condiciones".

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