La ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín, insistió hoy en que el Gobierno no es partidario del copago sanitario, ya que 'hay muchas medidas a tomar antes de iniciar ese debate'. A su juicio, algunas de estas medidas que ya están en marcha [como los recortes a los precios de los medicamentos mediante decreto y los nuevos precios de referencia] o se van a iniciar en breve [monodosis] van a conseguir 'importantes ahorros para el sistema sanitario'.

'Este Gobierno, junto a las comunidades autónomas, ha tomado un conjunto de medidas de ahorro en el gasto y eficiencia que algunos quieren minimizar, pero que van a garantizar aproximadamente un ahorro de 4.000 millones de euros', dijo Pajín, que apuesta por poner encima de la mesa 'medidas que garanticen la sostenibilidad del sistema sin que eso recaiga en el bolsillo de los ciudadanos y ciudadanas'.

La titular de Sanidad dejó claro además que está en contra de la medida en todas sus posibles interpretaciones: 'Hay quien piensa que debe ser un copago simbólico, y si es así no servirá para la sostenibilidad del sistema; y si estamos hablando de un copago real entonces podremos empezar un camino que no comparto, que es el de la inequidad, el de la desigualdad de derechos, porque muchos podrían dejar de hacerse pruebas por lo que cuestan'.

En el ámbito social, la ministra anunció la presentación por parte del Gobierno en los próximos meses de una nueva Ley de Protección de la Infancia, que buscará fomentar el acogimiento familiar 'como medida prioritaria' para proteger a los niños en situación de desamparo, tratando de evitar en la medida de lo posible su ingreso en instituciones.

'La experiencia de una vida familiar constructiva y positiva tiene que constituir una nueva oportunidad para los niños y niñas que por circunstancias familiares graves tienen que ser separados temporal o definitivamente de sus familias de origen', dijo la titular de Sanidad, que participó hoy en un desayuno informativo del Foro de la Nueva Economía.

En este sentido, Pajín explicó que la reforma del Gobierno 'buscará promover el acogimiento familiar como medida prioritaria, y en su caso la adopción, quedando la atención residencial como medida subsidiaria y último recurso para los casos que lo requieran'. En su opinión, 'el interés superior de la infancia exige garantizar un proyecto defintivo y estable para los niños y niñas en situación de desamparo'.