Siete propuestas para descubrir el Berguedà, la puerta de entrada al Pirineo catalán

El Berguedà es la comarca más septentrional de la provincia de Barcelona. A medio camino entre la capital catalana y la Cerdanya, es lugar de paso para muchos, sobre todo en verano y especialmente durante la época de nieve, ya que limita con el Pirineo catalán. 

El entorno natural es la alegría de la corona del territorio, pero no sólo eso: podemos encontrar patrimonio románico, historia de la industria del carbón, colonias textiles, dinosaurios, gastronomía... e incluso tres patrimonios mundiales de la UNESCO.

Parque Natural del Cadí Moixeró

El Parque Natural del Cadí i Moixeró es uno de los más grandes de Catalunya. La montaña es rica en flora, fauna y paisaje: las fuentes del Bastareny y del Llobregat, el pico de la Costa Cabirolera -que con 2.604 metros es el techo de la comarca y de la provincia-, el Comabona (2.547m), el Puigllançada (2.409m) y el popular Pedraforca (2.506m) son algunos de los lugares más emblemáticos de la zona.

Según detalla el portal turístico de la comarca, una extensa red de caminos guía a los visitantes por los sitios más sorprendentes. "Un conjunto de pueblecitos le acogerán para descansar disfrutando de su calma y gastronomía", añade.

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Durante el invierno, del 1 de octubre al 31 de mayo, el Parque (Bagà - Calle La Vinya, 1), está abierto de lunes a viernes de 8 a 15h, y las tardes del martes y viernes de 16 a 18:30 h. Los sábados de 9 a 13h y de 16 a 18:30h, y los domingos de 9 a 13h. En horario de verano, del 1 de junio al 30 de septiembre, se puede visitar de lunes a viernes de 9 a 13 h y de 16 a 19h, los sábados de 9 a 13 h y de 16 a 18:30 h y los domingos de 9 a 13 h.

Iglesias románicas

El Románico fue una corriente bastante homogénea que se desarrolló en la actual Europa occidental desde el siglo XI hasta el siglo XIII. En Catalunya estuvo muy presente, y en el Berguedà tuvo un papel muy importante en cuanto a arquitectura y pintura.

La comarca dispone hoy en día de doce iglesias prerrománicas y románicas. De éstas, seis están abiertas al público todo el año y gestionadas por diversas entidades. Se trata del Monasterio de Sant Llorenç, Sant Quirze de Pedret, Sant Sadurní de Rotgers, Sant Vicenç de Rus, Sant Vicenç d'Obiols y El Monasterio de Santa Maria de Serrateix.

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Las otras seis iglesias también se pueden visitar con visita previamente concertada, como Sant Pere de Serrateix. O bien pidiendo la llave en cada uno de los lugares indicados por cada iglesia: Santa Maria de Lillet, Sant Jaume de Frontanyà, Sant Martí de Puig-Reig, Sant Andreu de Sagàs y Santa Maria d’Avià.

Colonias Textiles del Llobregat

Catorce colonias y la fábrica de Cal Metre configuran una concentración única de colonias textiles. Se empezaron a construir durante la segunda mitad del siglo XIX junto al río Llobregat. Tienen tanto elementos comunes entre ellas como elementos singulares que hacen que todas sean únicas.

El conjunto patrimonial permite recordar uno de los capítulos esenciales del proceso de industrialización de Catalunya. Actualmente, se pueden visitar cinco espacios relacionados con las colonias: el Museo de la Colonia Vidal, La Torre de l'Amo de Viladomiu Nou, la Iglesia de la Colonia de Cal Pons, Casa Teixidor Bassacs y la Ruta Cultural de l'Ametlla de Merola.

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También se puede conocer mejor este pasado textil recorriendo a pie o pedaleando la Ruta de las Colonias textiles del Llobregat. Con un total de 32 km, el recorrido comienza en el Pont de Pedret y termina en Balsareny, siguiendo las marcas blancas y amarillas del PR-C144.

El Museu de les Mines de Cercs

El Museo de las Mines de Cercs muestra cómo se vivía y trabajaba en una mina de carbón. Se puede visitar un total de 450 metros de la galería Sant Romà. La industrial de la minería de carbón fue clave en la comarca del Berguedà y tuvo un gran peso económico y social durante muchos años.

Dinosaurios Fumanya es espacio muy vinculado al Museo de las Minas. Ofrece diversas actividades para conocer y experimentar la vida de estos seres desaparecidos hace millones de años. El yacimiento de Fumanya, en el término municipal de Fígols, fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) en 2014.

Senderismo

El Berguedà ha recuperado recientemente viejos caminos, con el objetivo de visibilizar territorio e historia, al tiempo que se disfruta de los paisajes y la naturaleza que ofrece esta pequeña comarca catalana. Montañas, valles, fuentes, bosques… la oferta para recorrer a pie y conectar con la naturaleza es interminable.

El portal de turismo del Berguedà ofrece más de setenta itinerarios circulares para hacer en familia, aunque también hay rutas para los más deportistas y experimentados. En este sentido, destacan especialmente recorridos como el Camí dels Bons Homes, el Camí Picasso, la Cavalls del Vent, la Ruta de l'Ermità o la ruta verde del Llobregat.

Gastronomía

Y, después de una buena caminata, ¿qué mejor que una buena comida? La gastronomía también es uno de los grandes atractivos de la comarca, especialmente durante la época de setas, trufa y caza.

Productos tan emblemáticos de la zona como los guisantes negros o el blat de moro [maíz] escairat se fusionan para los paladares más exquisitos. Platos como las patatas enmascaradas o la ternera con setas también son verdaderas insignias de la comarca del Berguedà, que mantiene su tradición y productos de gran calidad.

Patrimonio de la UNESCO

En el Berguedà existen dos grandes fiestas declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad: la Patum de Berga y la Fia-faia. El primero ha acabado convirtiéndose en una de las fiestas más representativas del calendario festivo de Catalunya.

Proveniente de las antiguas manifestaciones de teatro popular medieval, reúne a centenares de personas en una sola plaza. El fuego, la música y la fiesta son los principales protagonistas. La Patum se celebra en Corpus, pero al lo largo de todo el año podemos visitar los elementos de la fiesta en el Convent de Sant Francesc. Se trata de una muestra con más de un centenar de elementos de la festividad, que pueden visitarse los sábados y los domingos, de 11 a 14h y de 17 a 20:00h.

Por su parte, la Fia-Faia es una tradición navideña de origen precristiano, celebrada en Bagà y Sant Julià de Cerdanyola cada 24 de Diciembre.

Ambas celebraciones, junto con los castellers, las torres humanas, fueron declaradas en 2010 Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.