Las relaciones de pareja pueden verse afectadas por múltiples motivos, desde la rutina y los celos hasta los problemas de índole sexual o una mala comunicación. En todo caso, es posible acudir a los profesionales para que contribuyan a indicar las pautas a seguir para solventar una circunstancia que no tiene por qué acabar en ruptura, siempre que haya amor y disposición por ambas partes.
Si no tienes ni idea de cómo son este tipo de consultas, hoy te contamos cómo funcionan las terapias de pareja y en qué consisten exactamente para aprovechar sus beneficios.
Qué es la terapia de pareja
Una terapia de pareja, dirigida por un psicólogo profesional, es aquella orientada a mejorar la comunicación y solventar los problemas que surgen entre dos personas que han establecido una relación íntima. Hace años, se hacía referencia a ella exclusivamente como ayuda matrimonial, pero esta solo se refiere a uno de los tipos de parejas que existen: aquellas que se hayan casado. En todo caso, esta terapia o psicoterapia está destinada a todo el mundo y puede contribuir a mejorar y reforzar la relación sobremanera cuando los protagonistas se la toman en serio.
En caso contrario, cuando ya se ha tomado la decisión de romper, también es posible acudir a la terapia de pareja. Esta ayudará a afrontar la ruptura del mejor modo posible y superar el duelo sin que sea traumático. Contar con el apoyo de un profesional de la Psicología en estos casos resulta especialmente relevante en los supuestos en que hay niños pequeños y la pareja tendrá que aprender a coordinarse para su educación y cuidados.
Comunicación en la pareja
En la terapia de pareja, el profesional orienta a los miembros misma a la hora de comunicarse. Y es que todas las relaciones humanas están fundamentadas en la comunicación y suelen estar condenadas al desastre cuando esta falla. Por ese motivo, el psicoterapeuta incidirá en la mejor de la comunicación de la pareja.
Con frecuencia, también se le pide a la pareja que efectúe individualmente un listado con los aspectos negativos y positivos de la relación, lo que revela mucha información sobre la percepción que tiene cada uno de la misma y contribuye a detectar los problemas a los que se están enfrentando.
Plan de intervención personalizado
Estos primeros contactos permitirán que el profesional pueda realizar una evaluación sobre la situación de la pareja para diseñar un plan de intervención personalizado, siempre en un ambiente de máxima confianza y respeto mutuo, en el que todos pueden expresarse libremente. Asimismo, es necesario determinar qué objetivos se esperan o se pueden conseguir para solventar los problemas.
No olvidemos que una vez averiguado qué es lo que falla y cuáles son las posibles soluciones al respecto, los dos miembros de la pareja pueden poner de su parte para superarlo, pero también es posible que uno de los dos se niegue a aceptar la realidad y opte por la ruptura. En ambos casos, el apoyo del profesional para que la situación sea lo más sana y menos traumática posible es fundamental.
Beneficios de la terapia de pareja
En una pareja comprometida con la terapia y con ganas de solucionar ese obstáculo en su relación, los beneficios al mejorar su comunicación y seguir las pautas que les de el especialista son notables. Aprenderán a aceptar las diferencias del otro, gestionar mejor los conflictos y técnicas de inteligencia emocional.
También expresarán sus emociones de forma más adecuada y abierta sin esperar que el otro las adivine, obtendrán herramientas para poder lidiar con sensaciones como la culpa y comprenderán que el amor no basta para mantener una relación, sino que resultan condiciones imprescindibles el compromiso, el respeto, la compasión y la comunicación.
Cuándo funciona la terapia de pareja
Con la terapia de pareja sucede como con cualquier tipo de consulta o tratamiento psicológico. No basta ir y sentarse en la silla; hay que implicarse. Si los dos miembros de la relación están comprometidos con ella porque quieren solventar sus problemas y siguen las pautas y consejos que el profesional les ofrece, la terapia funcionará.
Pero en esos casos en los que uno de los miembros de la pareja se empeñe en culpar de todos sus problemas al otro o a la relación y se enroque en posiciones de una forma obstinada como poseedor de la verdad suprema, la terapia será un fracaso. No hay que olvidar que una pareja es un equipo que debe funcionar en conjunto, y nunca una persona en posición de poder sobre otra.
En cualquier cosa, acudir a un psicoterapeuta si tienes problemas en tu relación siempre será beneficioso para clarificar tu vida. Puede que, si tu pareja acepta a ir, descubras que está dispuesta a poner todo de su parte para mejorar la relación que tenéis y reforzar vuestro amor, pero también puede que averigües con quién estás realmente. En ambos casos, afrontar la realidad resulta fundamental para poder disfrutar del camino de la vida solventando los problemas que se presenten. Y si tienes de mano un psicólogo profesional todo será más fácil.
