El Gobierno de Mario Draghi ha aprobado hoy un plan de ayudas por valor de 32.000 millones de euros dirigido a familias y empresas afectadas por los recientes cierres impuestos para contener la pandemia y que ha dejado a más de 40 millones de italianos en un confinamiento.

"Este decreto es una respuesta significativa muy consistente a la pobreza y a las necesidades de las empresas", ha afirmado el primer ministro, Mario Draghi, en la rueda de prensa posterior a un Consejo de Ministros.

"Es una respuesta parcial, pero es lo máximo que hemos podido hacer a partir de la desviación" presupuestaria de 32.000 millones de euros que había sido aprobada por el Parlamento italiano, a propuesta del anterior Ejecutivo de Giuseppe Conte, ha añadido.

Tres cuartas partes van dirigidas a las empresas

Tres cuartas partes del paquete van dirigidas a apoyar a las empresas y habrá unos 11.000 millones a fondo perdido para compañías y autónomos que hayan sufrido una interrupción de su actividad por las medidas de confinamiento impuestas para frenar los contagios, que superan los 20.000 diarios desde hace días. La intención es que los primeros pagos lleguen a partir del 8 de abril a empresas y autónomos que los hayan solicitado.

"Hay una parte destinada a indemnizaciones para empresas que operan en la montaña, hay gran parte de este decreto dirigida al turismo, y una parte importante para los autónomos, incluidos los trabajadores del sector agrícola", destacó.

Prohibición de despido hasta junio

El decreto ha reservado casi 8.000 millones de euros para apoyar el empleo y combatir la pobreza, según ha añadido por su parte el ministro de Economía, Daniele de Franco. El ministro de Trabajo, Andrea Orlando, anunció que se alarga la prohibición de los despidos por motivos económicos hasta junio para los sectores con mecanismos de protección social, y hasta octubre para los que carecen de estas coberturas. Para proteger el empleo, el Gobierno ha reservado 3.000 millones de euros.

Paz fiscal para impagos de hasta 5.000 euros

Uno de los puntos que mayor controversia ha levantado es el que permite a las personas con rentas de hasta 30.000 euros anuales y con facturas sin pagar por valor de hasta 5.000 euros entre el año 2000 y 2010 para que puedan ponerse al día con Hacienda, sin penalizaciones y en algunos casos asumiendo solo un porcentaje de lo que deben.

El Gobierno quiere aliviar con esta medida a muchas familias que se encuentran en dificultades económicas tras la crisis de la pandemia, pero la misma ha sido criticada por partidos de la izquierda, que denuncian que es en realidad una amnistía fiscal.

Esta cuestión ha generado divisiones también en el Gobierno y ha retrasado el Consejo de Ministros durante más de dos horas: mientras que la ultraderechista Liga pedía aumentar la medida hasta los 10.000 euros y Forza Italia implantarla sin techos, el Partido Demócrata e Italia Viva preferían ser selectivos con las condiciones de eliminación de estos impagos.

Draghi ha opinado que esta medida permitirá seguir luchando contra la evasión fiscal y en la práctica tendrá un impacto "muy limitado" porque se referirá a un grupo muy pequeño de personas.

5.000 millones para acelerar la vacunación

Acelerar la campaña de vacunación es una de las prioridades del Gobierno de Draghi, y para ello han reservado una partida de 5.000 millones de euros para la compra de nuevas dosis y la logística y organización de los puntos de vacunación en el país.

Italia ha inoculado por el momento 7,4 millones de dosis y 2,3 millones de personas ya están inmunizadas con las dos que este fármaco contra el coronavirus necesita.

La patronal italiana Confindustria está evaluando cuántas empresas del país podrían servir de centro de vacunación y por el momento más de 7.000 han dado su disponibilidad para prestarlo en almacenes, oficinas, terminales aeroportuarias, hoteles, hipódromos y gimnasios.

El 75% de las compañías se encuentran en el norte del país, el 13% en el centro y el 12% entre el sur y las islas, según ha explicado Confindustria en una nota.

No es momento para la austeridad

El sector de la cultura y el espectáculo también será resarcido con más de 1.000 millones de euros. Draghi ha subrayado que ya llegará el momento de recortar la deuda pública, que en 2020 casi rozó el 160% del PIB (Producto Interior Bruto), pero que por ahora hay que seguir apostando por estímulos para que la economía se recupere y no pensar en la austeridad.