El enviado de la ONU para el Sáhara Occidental, Staffan de Mistura, llegó este lunes a la capital de este territorio, El Aaiún, proveniente de Rabat, donde se reunió con el representante de Marruecos en las Naciones Unidas, Omar Hilale.

Según informó la ONU en una nota a la prensa, Staffan de Mistura llevará a cabo "visitas en la región y reuniones, que buscan involucrar a todos los interesados ​​antes de la publicación del informe del secretario general al Consejo de Seguridad en octubre".

La ONU añade que De Mistura "espera seguir profundizando las consultas con todos los interesados ​​sobre las perspectivas de hacer avanzar constructivamente el proceso político en el Sáhara Occidental en el curso de estos compromisos regionales" e indica que informará sobre sus visitas al secretario general y al Consejo de Seguridad en octubre.

Una fuente diplomática marroquí informó de que, antes de aterrizar en el Sáhara Occidental, De Mistura pasó por Rabat, a donde llegó proveniente de París en un vuelo comercial. En la capital marroquí se reunió con Omar Hilale, según la fuente.

De acuerdo con la página de seguimiento de vuelos Flightradar24, aterrizó en la capital del Sáhara Occidental pasadas las 17 horas en un avión de la ONU proveniente de Rabat.

 Visita a los campamentos de refugiados en Tindouf

El viaje de Mistura se produce después de la visita el pasado fin de semana a los campamentos de refugiados saharauis de Tindouf, en Argelia, del encargado de la diplomacia estadounidense para Oriente Medio y el Norte de África, Joshua Harris, donde se reunió con el secretario general del Frente Polisario, Brahim Ghali.

Desde su nombramiento en noviembre de 2021, el enviado ha hecho un viaje a la región del Sáhara en enero de 2022, en el que visitó Rabat y los campamentos del Frente Polisario en Tinduf, pero el siguiente viaje en julio de ese año, que había sido anunciado también con escalas en el territorio del Sáhara Occidental, terminó tras pasar varios días en Rabat.

Entonces, De Mistura trasladó a Marruecos que necesitaba vía libre para viajar al territorio saharaui y reunirse con quien le pareciera pertinente, pero Rabat no aceptó y prefirió cancelar la visita.