El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, reconoció este martes que muchos votantes han castigado a su Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) en las elecciones municipales celebradas el domingo en Turquía. 'Esto es un mensaje del pueblo y aplicaremos las lecciones necesarias', dijo el domingo por la noche.

El AKP ha sido una vez más el partido más votado, con el 39% de los sufragios totales, pero perdió siete puntos respecto a las elecciones generales de 2007. Es su primer retroceso electoral desde que llegó al poder en 2002.

Aún así, los analistas esperan que el Gobierno de Erdogan impulse reformas que mejoren la posición turca con vistas a entrar en la UE. La oposición arrebató a los islamistas moderados del primer ministro algunas alcaldías importantes y logró avances en ciudades simbólicas como Estambul, donde ganó el alcalde del AKP, Kadir Topbas, pero el candidato del Partido Popular Republicano (CHP), Kemal Kilicdaroglu, de centroizquierda, aumentó el apoyo en nueve puntos y alcanzó el 37% de los votos. El CHP, fundado por el padre de la República, Kemal Atatürk, denunció fraude en cuatro distritos. En otros lugares del país también se denunciaron irregularidades.

'El primer ministro debería abandonar su manera enfadada y agresiva de la campaña y centrarse más en los problemas económicos, que es lo que se espera de un hombre de Estado', comentó Taha Akyol, uno de los analistas más reputados de Turquía.

Para frenar las críticas, se espera que Erdogan remodele su Gabinete y que proponga la creación de una comisión parlamentaria para reformar la Constitución. También puede anunciar el restablecimiento de relaciones con la vecina Armenia para superar el contencioso del supuesto genocidio de armenios por las tropas otomanas durante la Primera Guerra Mundial y acercarse, de paso, a la UE.

Lo que será inevitable es el inicio de presiones por parte de la oposición para que se convoquen elecciones anticipadas. Pero Erdogan ya lo ha descartado con rotundidad.

Otro de los aspectos destacados de los comicios del domingo fue el avance de los nacionalistas kurdos del Partido de la Sociedad Democrática (DTP) en las zonas del sureste del país. A diferencia de gobiernos anteriores, el AKP ha hecho varios gestos para reconocer sus derechos aunque, de momento, no le han reportado resultados en las urnas.