Uno de los solicitantes de asilo recluidos en el Bibby Stockholm, el  barco cárcel para migrantes enviado por el Gobierno de Reino Unido a la costa de Dorset, sur de Inglaterra, ha sido hallado este martes sin vida en el buque. Según fuentes citadas por la BBC, el fallecido, cuya nacionalidad no ha trascendido, se ha quitado la vida. Las autoridades británicas no han dado más detalles y se han limitado a decir que se realizará una investigación "a fondo".

El fallecimiento se produce en pleno debate político en torno a las medidas que quiere adoptar el Ejecutivo de Rishi Sunak para contener la llegada de extranjeros. El ministro de Interior, James Cleverly, ha participado este martes en el arranque en la Cámara de los Comunes del debate de la pieza legislativa sobre el plan del Gobierno para enviar a Ruanda a los migrantes que están en situación irregular a fin de que tramiten en ese país sus solicitudes de asilo.

En la actualidad, unos 200 migrantes se encuentran a bordo del Bibby Stockholm. El barco, con capacidad para acoger a 500 personas, cuenta con tres pisos con 222 camarotes y recluye a hombres adultos solteros mientras se procesan sus solicitudes de asilo.

El buque fue desplegado en agosto, aunque tras un primer traslado fallido por un brote de legionela no comenzó a operar de forma continua hasta el mes de octubre. El Gobierno quería con este buque ahorrarse parte de los costes de acoger a estas personas en hoteles. 

La noticia del fallecimiento ha suscitado más críticas de activistas que arremeten contra las condiciones a bordo de la embarcación y que piden que el buque deje de utilizarse como alojamiento para migrantes. Steve Smith, consejero delegado de la organización Care4Calais, ha considerado que el Gobierno británico "debe asumir la responsabilidad por esta tragedia humana" y ha lamentado que "han ignorado el trauma que infligen a las personas que son enviadas al Bibby Stockholm, y a los cientos que están siendo alojados en exbarracones militares".