Un juez federal en Virginia, Estados Unidos, ha declarado inconstitucional una parte esencial del texto de la reforma sanitaria, aprobada en marzo y que supuso una histórica victoria de Barack Obama.

La reforma contó con 220 votos a favor y 211 en contra en la última votación, la del segundo proyecto de ley, que introdujo una serie de enmiendas al primero para dejarlo más al gusto de la Cámara de Representantes.

Ahora, el juez Henry Hudson, nombrado por el ex presidente estadounidense George W. Bush en 2002, sostiene, en un fallo de 42 folios, que el Congreso no puede obligar a adquirir un seguro sanitario antes de 2014 so pena de multa. 'Esta es una expansión sin precedentes de las atribuciones del gobierno federal que no pueden sustentarse en la autoridad que tiene el Congreso para regular el comercio interestatal', declaró el juez.

La administración del actual presidente ya ha anunciado que recurrirá la decisión, que probablemente acabará en el Tribunal Supremo. La portavoz del departamento de Justicia, Tracy Schmaler, declaró que 'existe un precedente jurídico claro y bien establecido. El Congreso actuó dentro de su autoridad constitucional en la aprobación de esta ley y estamos seguros de que finalmente prevalecerá'.

La decisión que ha adoptado el juez de Virginia, tras una demanda interpuesta por el el fiscal general del Estado, Ken Cuccinelli, no es la única que se ha interpuesto contra la ley, que está siendo cuestionada en tribunales federales en todo el país.

Varios Estados han promulgado leyes que invalidan algunos aspectos de la legislación

Varios Estados han promulgado leyes que invalidan en sus jurisdicciones algunos aspectos de la legislación que consumió el debate político en el primer año de la presidencia de Obama.

En otras dos demandas, dos jueces federales en Lynchburg (Virginia) y en Michigan, han dictaminado que esa misma estipulación es legal. Un juez federal en Florida sopesa ahora la constitucionalidad del mandato de seguro médico individual en una querella presentada en forma conjunta por 20 estados.

La medida busca dar cobertura sanitaria a cerca de 30 millones de estadounidenses que en la actualidad carecen de ella. Entre otros aspectos, la reforma prohibirá a las aseguradoras rechazar dar cobertura a personas que ya padezcan alguna enfermedad y hará obligatorio para la mayoría de los residentes el contar con un seguro médico.