Al menos cuatro personas han muerto y otras nueve han resultado heridas, entre ellas dos agentes de policía, en un tiroteo ocurrido este lunes por la mañana, a las 8.30 hora local, en un banco del centro de la ciudad estadounidense de Louisville. Al principio, la Policía informó de cinco fallecidos, pero luego corrigió esa cifra y explicó que cuatro personas han muerto como víctimas del ataque.

El causante del tiroteo ha sido "neutralizado" y ha fallecido dentro del banco en el intercambio de disparos con los agentes. Tenía 23 años y era un empleado de la institución financiera.

Los heridos han sido trasladados a hospitales cercanos. Los dos agentes de policía heridos están graves. Uno de ellos ha tenido que ser operado en el hospital universitario en Louisville. Las cuatro víctimas mortales, tres hombres y una mujer, tenían entre 40 y 67 años y han perdido la vida en el momento del tiroteo.

Según ha explicado en una rueda de prensa el teniente coronel de la Policía de Louisville, Paul L. Humphrey, y recoge Efe, la policía fue capaz de responder al suceso en solo tres minutos y, al entrar al banco, el atacante todavía estaba disparando. 

En la misma rueda de prensa, el alcalde de la ciudad, Craig Greenberg, ha alabado la rápida respuesta de la policía y ha llegado a calificar a los agentes de "héroes". Ha añadido que lo sucedido es una "tragedia" y ha expresado su deseo de que los vecinos encuentren consuelo dentro de su comunidad para evitar que continúen estos "horribles" actos de violencia armada.

El tiroteo se ha producido en un edificio del centro de la ciudad en el que se encuentra una sede del banco Old National Bank, una entidad financiera regional con sucursales en el sureste y medio oeste de Estados Unidos. Se encuentra junto a Slugger Field, el campo de béisbol del equipo local, los Louisville Bats, una de las zonas más concurridas de esta ciudad.

Biden arremete contra los republicanos

El presidente estadounidense, Joe Biden, ha arremetido contra los republicanos del Congreso y les ha reprochado que no hayan reformado las leyes que regulan la posesión de armas de fuego para evitar tiroteos como el de este lunes.

"Una vez más, nuestra nación está de luto tras un acto de violencia armada sin sentido. Jill y yo rezamos por las vidas perdidas y que se han visto afectadas por el tiroteo de hoy", ha afirmado el mandatario en un mensaje en Twitter.

"Demasiados estadounidenses están pagando con sus vidas el precio de esta inacción. ¿Cuándo actuarán los republicanos en el Congreso para proteger a nuestras comunidades?", ha sentenciado.