La Policía de Columbus, en Ohio, Estados Unidos, ha matado a tiros a una adolescente negra. Según las fuerzas de seguridad, la joven había amenazado a otras dos con un cuchillo. El suceso, que ha provocado que decenas de personas salgan a la calle en protesta, se produjo poco antes de que se conociera la sentencia del juicio por la muerte de George Floyd.

La División de la Policía de la ciudad ha publicado imágenes de la cámara corporal del oficial autor de los disparos, quien, según las autoridades, había acudido al lugar tras responder a una llamada del servicio de emergencias en la que le informaron sobre un intento de apuñalamiento.

Las primeras imágenes que se han compartido muestran al agente acercándose  al camino de entrada de una casa donde un grupo de gente parece estar peleándose. La Policía ha asegurado que en el vídeo a cámara lenta se ve que el oficial disparó a la joven justo "cuando estaba tratando de apuñalar" a otra. El agente disparó varias veces contra la menor (en la grabación se pueden escuchar hasta cuatro detonaciones).

La joven cayó al suelo junto a un automóvil que estaba estacionado en el camino de entrada, donde, según la Policía, las imágenes de la cámara corporal mostraban un cuchillo en el suelo. La adolescente muerta fue identificada como Ma’Khia Bryant, de 16 años, por una portavoz de Servicios para Niños del Condado de Franklin, quien dijo en un correo electrónico que la joven había estado al cuidado de ese departamento, según The New York Times.

El nombre del oficial implicado, que según las autoridades fue relevado del servicio mientras se investiga el tiroteo, no ha sido revelado. La Oficina de Investigación Criminal de Ohio llevará a cabo una investigación independiente, que según los funcionarios locales es la misma que se realiza cada vez que un oficial dispara a alguien.

Tras conocerse la muerte de la adolescente, manifestantes se han congregado primero en el lugar del incidente para posteriormente marchar hasta la sede del Capitolio estatal y del Departamento de Policía de la ciudad.

El suceso se ha producido el mismo día que el exagente de la Policía de Mineápolis Derek Chauvin era declarado culpable de todos los cargos de los que se le acusaba por la muerte por asfixia de George Floyd. La muerte de Floyd a manos de Chauvin, que durante más de nueve minutos aprisionó con su rodilla el cuello de la víctima, dio la vuelta al mundo en mayo del año pasado y provocó una enorme ola de protestas en Estados Unidos.