Público
Público

Vázquez, primera mujer presidenciable en México

La exministra del PAN derrota en las primarias al delfín de Felipe Calderón

MAJO SISCAR

Es la primera mujer con posibilidades de lograr la Presidencia de México. Josefina Vázquez Mota, que fue ministra en los dos gobiernos del Partido Acción Nacional (PAN), se erigió ayer candidata de la formación conservadora a las elecciones presidenciales de julio. Siguiendo la tradición del PAN, derrotó en las primarias al favorito del actual presidente mexicano, el exministro de Hacienda Ernesto Cordero. Hace seis años, Felipe Calderón también venció al delfín de su antecesor en el Gobierno y, precisamente, Vázquez Mota fue uno de sus apoyos clave.

La entonces ministra de Desarrollo Social abrazó la causa de Calderón desde abril de 2005, pese al riesgo de confrontación con el entonces presidente, Vicente Fox. Como premio se convirtió en la coordinadora política de la campaña del actual mandatario. Sin embargo, pronto tuvo desavenencias con la cúpula que rodeaba al jefe del Ejecutivo y fue relegada al Ministerio de Educación. Las tensiones con Calderón estallaron en diciembre de 2010, cuando se negó a ser candidata a gobernadora del Estado de México unas elecciones que el PAN tenía perdidas de antemano e intensificó la construcción de su proyecto presidencial.

La candidata tratará de alejarse de la imagen beligerante del actual presidente

Su ambición y su intensa capacidad de trabajo, según sus allegados, la han llevado hasta donde está. Ahora, pese a su dedicación política a tiempo completo, Vázquez Mota reivindica su perfil de mujer de 51 años, madre de tres hijas y espíritu humanista cultivado en las carteras sociales para alejarse del cariz beligerante del PAN: la estrategia de combate militar al narcotráfico, su máxima bandera, ha provocado más de 60.000 muertos.

La panista no se desmarca de ella, pero prefiere abanderar el combate a la corrupción y el avance en la transparencia. Sin embargo, es una política tremendamente cauta. Apenas se ha pronunciado en las grandes cuestiones a las que se enfrenta el país: seguridad, telecomunicaciones, sector energético, recaudación fiscal... Los analistas coinciden en que ha sido 'una esfinge sonriente'. Sus críticos alegan que más que cautela es desconocimiento. Sus partidarios apelan a su formación como economista, su larga trayectoria en el partido y su talante conciliador, que daría continuidad a la política pactista de Calderón con el PRI.

Ella, en cambio, se reivindica como 'la señora de la casa' que viene a barrer la corrupción del país y a evitar el regreso del PRI, favorito en las encuestas. De hecho, hace uso del apelativo desde el último de los patinazos del candidato priísta, Enrique Peña Nieto, que para justificarse por no saber el precio del kilo de tortillas (el pan mexicano) alegó que él no es 'la señora de la casa'.

Es considerada 'una esfinge sonriente', pero se vende como 'la señora de la casa'

Frente a ello, Vázquez Mota ostenta su condición de cuidadora y ya en su primera aparición como candidata lo hizo acompañada de su esposo y sus hijas. Entonces, pidió unidad a su partido para enfrentarse al PRI. 'Comenzamos un nuevo camino; el camino para derrotar al verdadero adversario de México, a quien representa el autoritarismo y lo peor de la práctica antidemocrática, a quien representa el regreso hacia la corrupción como sistema y la impunidad como condena: ese adversario es Peña Nieto y su partido'.

Sin embargo, esa misma corrupción que denuncia también marcó las primarias del PAN. En una lucha encarnizada por salir victoriosos, tanto ella como Cordero recurrieron a las viejas prácticas clientelistas del PRI. Y ambos repartieron alimentos para comprar votos.

¿Te ha resultado interesante esta noticia?

Más noticias de Internacional