Si el capitán es el villano del hundimiento del Sewol Nam Yoon- chul es el héroe póstumo. El profesor de 35 años ha sido señalado por muchos supervivientes como su salvador. Corea llora su muerte. Como la de los otros cuarenta y nueve cuerpos rescatados hasta el momento. Las unidades de salvamento ya han logrado acceder dentro del ferry gracias a la utilización de cables guía que mitigan el fuerte oleaje existente en la zona. Dieciséis nuevos cuerpos han llegado al puerto de Jindo. Dentro quedan todavía 246, la mayoría niños. Y con cada cadaver rescatado aumenta la desesperación y el enfado de los que todavía no han recuperado a sus seres queridos. Han llegado a enfrentarse a la policía en su protesta por la lentitud del rescate. Mientras en la universidad de Yanse quince mil personas se reunieron para rezar en el domingo de resurrección por los desaparecidos. "Al igual que Jesucristo resucitó de la muerte, deseo un milagro para los atrapados" afirma esta mujer. Un deseo compartido por todos pero que se termina en el acto de fe. No hay esperanzas de encontrar a nadie con vida dentro del Sewol.