No es un error. Davidelfín es la marca, y David Delfín el diseñador. Aunque tampoco, porque en realidad se llama Diego David Domínguez González. Siendo de donde es (Ronda, Málaga) y apellidándose como yo, me pregunto si no seremos familiares lejanos... Si así fuera, empiezo a comprenderlo todo.

Como toda persona tengo mis debilidades. Y en lo que a moda española se refiere tengo una muy clara y es este David Delfín. No lo puedo evitar, ni quiero. Y menos después del desfile que nos ha ofrecido en la tercera jornada de la MBFWM.

En sus tres últimas colecciones fue depurando su estilo, evolucionando hacia lo que requería el mercado porque del aire no vive el hombre. Eso sí, nunca ha perdido sus señas de identidad. En Will el diseñador apuesta por el negro y el blanco como base, con detalles como cuellos, puños y cinturones en mostaza y verde. Vestidos con silueta lápiz y abrigos rectos. También vestidos largos y sus ya identificables bermudas y camisas para hombre, además de trajes de chaqueta. Las cremalleras, estratégicamente colocadas en la parte trasera de las prendas femeninas y por doquier en las chaquetas. No me puedo olvidar de los maravillosos Louboutins que siempre firma Delfín, ni de los bolsos que ha vuelto a diseñarle Pelayo Díaz, ni tampoco del estampado de leopardo suave, pero con fuerza, que ha utilizado en algunos de los diseños.

La top model Marina Pérez durante el desfile.

Como todos sus trabajos, esconde un sentimiento. Aunque más que esconderlo lo grita. Will es toda una declaración de intenciones, una promesa de futuro, el deseo de eternidad.

Todo esto está muy bien, pero si le unes el detalle de que ha montado el show más espectacular visto en Cibeles, la cosa mejora. Y mucho. Desde hace ocho años, como "una especie de tradición", me explicaba el diseñador, todos sus desfiles terminaban con una canción de Fangoria. Las pasadas Navidades, cuando Alaska grabó junto a Bimba Bosé la canción Absolutamente, nació la idea: ¿Y si la cantaban en directo durante el desfile? "Fue de forma natural", me cuenta Alaska, "la música y la moda son dos disciplinas que tienen mucho en común".

Modelo que lleva el mismo traje de chaqueta que lució también Mario Vaquerizo. No apto para clásicos. A este estampado me refería antes.

Así es como se gestó, en el más absoluto de los secretos, el show del que mañana no habrá medio que no haya hablado. En una puesta de escena que simulaba una espacio en obras (andamios, plataformas, luces de seguridad...) el trío formado por Alaska, Mario Vaquerizo y Bimba Bosé -vestidos de la nueva colección de Davidelfín- cantó en "riguroso playback" (bromea el diseñador) mientras las modelos se despedían.

Pero antes...

Chapa y pintura.

Mario Vaquerizo, marido de Alaska, showman, miembro de las Nancys Rubias, colaborador de televisión, relaciones públicas... se prepara para la actuación.

La musa del diseñador, Bimba Bosé, en maquillaje.

Alaska haciendo lo propio, minutos antes de su salida al escenario.

Pero no venían solos... Un par de chicos muy amables les acompañaban:

Son los de El Terrat, los que producen para MTV el reality 'Alaska & Mario', que ya va a por su segunda (y esperadísima) temporada. Seguro que toda la historia esta del desfile les queda genial para un capitulo de los suyos.

El resto lo podéis leer en Público y en la web...