Casado le cobra la factura a la CEOE por su postura sobre los indultos

La llegada al curso de Verano de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), del líder del PP, Pablo Casado, y del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ya anticipaba un tenso encuentro tras la polémica suscitada a cuenta de los indultos a los presos del procés. Mientras Garamendi se mostraba conciliador, Casado esquivaba a la prensa y evitaba posar junto al empresario. Una semanas antes el popular había criticado su "complicidad" con el Gobierno.

Garamendi ha optado por ofrecer "colaboración" al líder del PP antes de desearle "lo mejor" porque la "alternancia política es buena cuando toque". "Sabe que siempre tenemos una actitud y una línea de confianza muy importante, que vamos a seguir teniéndola como siempre", ha señalado.

Un guante que el conservador no ha recogido. Casado ha cargado contra la reforma de las pensiones que apenas una hora más tarde ha firmado Garamendi en La Moncloa: "Ya está bien de que nos tomen el pelo", ha inquirido el jefe de la oposición, que ha criticado la eliminación del factor de sostenibilidad en las pensiones. A su juicio, vincular este instrumento a la subida del IPC es un error que ya cometió José Luis Rodríguez Zapatero.

Asimismo Casado ha mostrado de nuevo su rechazo a los indultos a los presos del procés después de Garamendi afirmara en una entrevista en TVE que los indultos eran "bienvenidos" si servían para "normalizar la situación" en Catalunya. Una afirmación que se vio obligado a matizar más tarde tras las críticas recibidas, entre ellas las del propio Casado. El líder del PP llegó a afirmar que los empresarios que apoyan los indultos a los dirigentes independentistas "no representan a nadie" y son "una platea subvencionada".

Casado ha enfatizado que la "seguridad jurídica es también cumplir la ley" porque "igual que a un empresario no le pueden cambiar la fiscalidad sin pasar por el Congreso" y "tiene que pagar la multa si hay una inspección de hacienda que es negativa" a "un español no se le puede cambiar su patria sin pasar por el Congreso" ni se puede "indultar a un delincuente que ha dado un golpe al Estado a su propio país".