Cargando...

El número dos de Fernández Díaz estuvo informado de la operación ilegal contra CNI y Asuntos Internos

Fechas clave

Publicidad

El secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, conversa con el pequeño Nicolás.

Actualizado:

MADRID.- La investigación sobre el caso del pequeño Nicolás que instruye el juzgado número 2 de Madrid apunta a que los máximos responsables del ministerio del Interior estaban informados puntualmente de la elaboración y distribución de la grabación ilegal hecha a agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y de Asuntos Internos de la Policía, operación que se llevó acabo entre octubre y diciembre de 2014 por miembros de la cúpula policial.

Publicidad

Desde la Secretaría de Estado de Seguridad se han hecho a partir de 2012 los encargos politicos a la cupula policial, que dirige el comisario Eugenio Pino. Las grandes obras proyectadas por Jorge Fernández Díaz y que Francisco Martínez encomienda van desde acabar con el proceso independentista en Catalunya, exterminar al rival político que supone Podemos o ayudar a un presunto estafador de 20 años como el pequeño Nicolás a que se archive la causa contra él, por hacerse pasar por agente del CNI, elaborar informes falsos de diferentes departamentos del Gobierno y el Estado o intentar estafar a empresarios.
Entre amigos

Click to enlarge
A fallback.

Fechas clave

El 20 de octubre, una semana después de la detención, un redactor del medio de comunicación que dirige la mujer del comisario Villarejo graba mediante un sistema remoto la reunión que se celebra en la Unidad de Asuntos Internos entre investigadores del caso Nicolás y agentes del CNI, que como desveló Público tenían autorizada una investigación más amplia .

Obstrucción a la Justicia

Según exponen los investigadores en el informe presentado al juzgado, las pruebas recabadas apuntan a que tanto el secretario de Estado de Interior como la cúpula policial y los periodistas ejecutaron una grabación ilegal a agentes del CNI y Asuntos Internos, la facilitaron al sospechoso y a la prensa, en lugar de entregarla al juzgado si hubieran tenido la intención de colaborar con la Justicia y perseguir el delito.

Publicidad