El Gobierno de Juanma Moreno ha honrado este martes el 4 de diciembre de 1977, fecha decisiva para la consecución de la autonomía, cuando masivas manifestaciones recorrieron las calles de las ciudades de Andalucía.

El Consejo de Gobierno ha aprobado, vía decreto, que ese día sea el día de la Bandera de Andalucía. La jornada estará descafeinada porque, al contrario que el 28-F, no será un día de fiesta y seguirá, por tanto, siendo laborable. En ella, la Junta pretende impulsar iniciativas educativas, sociales e institucionales que contribuyan a "garantizar la máxima difusión de los valores y significados que encarna" la bandera.

El consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, explicó que se trata de organizar iniciativas en el ámbito educativo "especialmente dirigidas a actividades culturales, charlas, conferencias" que en los diferentes niveles escolares "contribuyan a recordar la historia de los símbolos de Andalucía", es decir, su escudo, bandera, lema e himno, según recoge Europa Press.

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, que está en Londres en una gira de promoción de la Comunidad y participó del Consejo de Gobierno por vía telemática, manifestó en su cuenta de Twitter que "el 4-D fue un hito histórico": "Conmemoremos juntos la defensa del pueblo andaluz de una autonomía plena. Creo en un andalucismo inclusivo y transversal".

Honrar el 4-D es una vieja reivindicación de la izquierda andaluza que hasta ahora los gobiernos del PSOE y también el mismo Moreno, en la legislatura pasada, habían rechazado. Dos veces presentó Teresa Rodríguez, exlíder de Podemos, ahora portavoz de Adelante Andalucía, iniciativas similares a la aprobada este martes.

La idea obedece a una estrategia deliberada por parte del PP andaluz, que está empeñado en pintar sus siglas de verde y blanco. La idea es copiar la senda andalucista ya explotada durante décadas por el PSOE de Andalucía, con gran éxito electoral. Moreno hoy puede ir por ese camino, gracias a la intuición de Javier Arenas, quien en 2007, sin que casi nadie en su partido lo viera claro, decidió in extremis apoyar la reforma del Estatuto, después de años en otra senda.

El presidente de la Junta lleva ya un lustro reivindicando la figura de Manuel Clavero Arévalo, exministro de Adolfo Suárez, y aceptó declarar el 4-D como día de la bandera, tras mantener un coloquio con el expresidente del hoy desaparecido Partido Andalucista y exalcalde de Sevilla, Alejandro Rojas Marcos.

Muertos de segunda

Sin embargo, la declaración del Gobierno andaluz olvida por completo a Manuel José García Caparrós, que ese 4-D de 1977 murió en la manifestación de Málaga. Moreno, desde que es presidente, de hecho, lo ignora. "Hoy por hoy no tenemos noticia de nada. Esta gente lo han hecho para colgarse alguna medallita", afirma a Público Puri García Caparrós, hermana del fallecido, cuando se le pregunta.

Sanz fue preguntado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno si la conmemoración incluiría algún homenaje a García Caparrós y respondió así, según recoge Europa Press: "Todos somos conscientes de lo que ocurrió aquel 4 de diciembre en Málaga y su manifestación. Siempre hemos tenido en cuenta y tenemos muy presente aquel hecho, un acontecimiento trágico".

Si bien, apostilló, la conmemoración en este caso del 4 de diciembre "se refiere a la bandera" de Andalucía, "símbolo que nos une y fortalece cada día nuestra vida en común", y que es "lo que vamos a recordar ese día", según recoge Europa Press.

"Aclaman a sus muertos, pero los nuestros como son de segunda se les olvidan. A ver si alguna vez se dignan a contar lo que pasó aquel día en Málaga y no se echan balones unos a otros y hacen público todo el sumario y todas las declaraciones de los testigos", se lamentó Puri García Caparrós, la hermana de Manuel José.