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El Parlament ratifica a Torra y acusa la JEC de impulsar un "golpe de Estado"

ERC pide "responsabilidad" a JxCat y apoyar la mesa de diálogo; la CUP critica el papel de los republicanos y los comunes en Madrid y Ciudadanos reclama elecciones anticipadas en Catalunya.

El presidente de la Generalitat, Quim Torra (d) asiste con el vicepresidente Pere Aragonés (i) en el Parlament de Catalunya. (QUIQUE GARCÍA | EFE)

Enésima jornada de tensión entre las paredes del Parlamento de Catalunya. El presidente del Parlamento, Roger Torrent, abrió este sábado la esperada sesión de hoy a las 17:07 horas. A votación, una moción conjunta presentada por JxCat, ERC y la CUP para rechazar la resolución de la Junta Electoral Central (JEC) que pide inhabilitar al presidente de la Generalitat, Quim Torra, por haber sido condenado por desobediencia aunque la sentencia no es firme.

El documento calificaba la decisión de "golpe de estado" y solicitaba a la Cámara ratificar Torra "como diputado del Parlamento de Catalunya y presidente de la Generalidad de Catalunya", además de denunciar ante el Parlamento Europeo el incumplimiento de la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) y exigir "el fin de la represión, el reconocimiento del derecho de autodeterminación del pueblo de Catalunya, la amnistía de los presos y presas" y "el libre retorno de los exiliados y exiliadas ". No tardó ni un minuto en protestar el portavoz de Ciutadans (C 's), Carlos Carrizosa, que tildó la sesión "de un nuevo atropello", comparable a los de septiembre de 2017, durante la aprobación de las leyes del referéndum del 1 de octubre los días 6 y 7 de ese mes.

"Este pleno extraordinario no debería haberse celebrado nunca", comenzó Torra su intervención. "Vivimos un nuevo intento de alteración de la voluntad popular de los catalanes", afirmó al señalar que también las dictaduras están equipadas con un aparato legal y "eso no las convierte en una democracia". El presidente del Gobierno exigió que se respete la "voluntad mayoritaria de la ciudadanía" expresada en las urnas ante la decisión "de este grupo de señores de Madrid que se denomina la JEC", que ha "usurpado las funciones de un tribunal "y que pretende" destituir a un presidente de la Generalitat, esta vez sin pasar por el Senado", dijo.

Torra emplazó a los diputados a votar "con conciencia" una cuestión que no tiene que ver "conmigo, ni con mi presidencia, ni con la acción de gobierno". "Nos jugamos si este parlamento es soberano o no", remachó. "Hoy soy yo pero mañana puede ser cualquiera de vosotros", alertó antes de llamar a "decir basta a la degradación de este parlamento" y "defender las instituciones, la soberanía y la lealtad a la voluntad popular y el compromiso inquebrantable con la democracia".

"Solo reconozco a esta Cámara la capacidad de retirarme la confianza", aseguró Torra antes de preguntar a los comunes si la suya es "una propuesta honesta y sincera" o "un nuevo trampa para distraernos de nuestra voluntad de libertad ". "Ahora es la hora de saber si la represión política se ha acabado y es rechazada y condenada", añadió. Torra terminó su discurso pidiendo convocar la Asamblea de cargos electos "para encarar la respuesta a esta nueva acción". Antes de reanudarse la sesión, Torra -que adornó su discurso con referencias a Rosa Luxemburgo y Manuel de Pedrolo- salió a las puertas en el Parlament a saludar a los afiliados y simpatizantes de la Asamblea Nacional de Catalunya (ANC) y miembros del CDR que se abrieron paso en la Ciutadella para demostrar su apoyo al presidente catalán.

JxCat y la CUP, críticos con los comunes

La portavoz de Cs y líder de la oposición, Lorena Roldán, saludó a Torra como "expresidente" y le pidió que convoque elecciones para poner fin a "la etapa negra" del proceso para, más tarde, recriminó a los socialistas " mirar hacia otro lado durante el crecimiento del independentismo en Catalunya. "Con ellos no se puede ir", agregó, "ni a la vuelta de la esquina". De manera similar se expresó Alejandro Fernández, del Partido Popular, que se refirió "al grotesco episodio de la bandera española como perfecta metáfora de su mandato".

El secretario primero del PSC, Miquel Iceta, ha querido matizar a su vez que "la inhabilitación sólo puede derivarse de una sentencia judicial firme" y no la de la decisión de la JEC, por lo que tal vez no era el mejor momento para celebrar el pleno y ha propuesto que "el Parlamento proponga un recurso" en la JEC tiempo que ha recordado que desde el PSC se lo "advertir" que retirara la pancarta. "Todo lo que ha pasado nos impide ahora encarar el futuro?", Preguntó Iceta antes de pedir un compromiso a los partidos para "encontrar un terreno común que al 100% no satisfará nadie". "No dejemos que el pasado impida actuar en el presente", ha reiterado en reivindicar el diálogo "dentro de la ley, incluso para cambiarla".

No menos esperada fue la intervención de la portavoz de Catalunya En Común Podemos, Jéssica Albiach, que describió la decisión de la JEC como "un disparate". "No podemos quedar impasibles ante los ataques a nuestras instituciones", dijo Albiach al recordar que la decisión de la JEC fue anunciada por el presidente del PP, Pablo Casado, antes que por el mismo organismo. La portavoz de los comunes habló "de una guerra judicial y administrativa contra el autogobierno y el Gobierno progresista" que comparó con los casos de Lula en Brasil o Fernández de Kircher en Argentina. "Están intentando ganar en los tribunales lo que no ganaron en las urnas", ha denunciado Albiach antes de advertir que la derecha querrá desestabilizar el gobierno español exactamente de la misma manera que lo ha hecho en Catalunya. A pesar de ello, concluyó, "la esperanza está abriendo camino frente a su odio".

La mano tendida por los comunes no fue ignorada por ERC, la portavoz, Marta Vilalta, planteó la necesidad "blindar la presidencia del presidente Quim Torra", pero también "blindar el diálogo, la negociación y la vía política". "Tenemos la oportunidad y la responsabilidad de aprovechar esta posibilidad", explicó Vilalta. La portavoz republicana criticó la decisión de la JEC como "una operación de estado" para cambiar "por la puerta trasera" las decisiones que toman los parlamentos. "La libertad de expresión no puede ser nunca delito", manifestó. Y, para desvanecer dudas sobre el futuro de la coalición de gobierno en Catalunya, agregó que republicanos y "Juntas" son "en el mismo equipo" por "jugar la misma partida de la democracia: autodeterminación y amnistía". "Nos quieren divididos, pero no lo conseguirán", afirmó Vilalta, que instó a Torra a liderar la tabla de diálogo entre gobiernos y la CUP en dar su apoyo sin renunciar a la protesta democrática.

Después de describir la decisión de la JEC como "un 155 por la puerta trasera", el diputado de JxCat Albert Batet evitó cargar contra ERC y concentró sus ataques al PSC y los comunes. A los socialistas les criticó por desentenderse de todo lo sucedido y sacudirse responsabilidades acusando la derecha española, cuando, indicó, el candidato socialista, Pedro Sánchez, dio "apoyo a las euroórdenes". Si "ahora quieren rectificar", prosiguió Batet, "es el momento que hoy anuncien que no apoyan" a la decisión de la JEC. "Hechos, no palabras", reiteró antes de disparar a los comunes otro dardo: "En democracia hay que estar siempre, cuando se está en el Gobierno y cuando se está en la oposición".

Muy crítico se mostró el diputado de la CUP Carles Riera, que comenzó expresando su solidaridad con Torra pesar de no compartir las políticas de su Gobierno, en particular en materia social. Sin mencionar ERC o Podemos, Riera habló de los que quieren cerrar "los espacios de libertad" abiertos por el 1-O. "El Estado está perdiendo el combate internacional", valoró Riera antes de lamentar que hay fuerzas políticas que quieren "apuntalarlo y reforzarlo" en "un momento que podíamos profundizar el conflicto democrático" priorizando "sus intereses partidistas y más comprometidas con la preservación del statu quo que con nuestro pueblo ". Esta decisión, a juicio de la CUP, conllevará una "refundación del régimen del 78" que será "a cambio de muelles" y "bajo la amenaza de más represión". "Hoy el señor Pedro Sánchez ha sido clarísimo: todo dentro de la constitución", ha cerrado su intervención Riera, "no se equivoquen y no nos engañen".

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